Lo quiere condenar

Los ánimos son totalmente diferentes. Los momentos también. El clásico de Avellaneda se vive con mucha expectativa en la previa de parte de ambas hinchadas. Independiente tiene la gran chance de casi condenar a Racing a jugar la Promoción con un equipo de la B Nacional si hoy logra vencerlo en el estadio de Vélez.
El equipo dirigido por Claudio Borghi acumula siete partido sin perder, con cinco triunfos seguidos y dos empates. Las dudas en la semana se plantearon por la recuperación de Daniel Montenegro de su distensión y de Freddy Grisales de su esguince de tobillo. El Rolfi hizo fútbol ayer y el jueves y el técnico lo vio muy bien, por lo que será titular. Por su parte, el colombiano no jugará a pesar de estar en condiciones, ya que no viajó con su Selección para jugar varios amistosos los dirigentes del Rojo no quieren problemas con la Federación de Colombia.
El Bichi se mostró mu tranquilo en la previa, a pesar de sus declaraciones acerca de que es hincha de Racing: "Fue una semana común y corriente. Llegamos confiados. Si ganamos no voy a sobrar a nadie, y si perdemos tampoco voy a insultar. Soy un profesional y lo voy a vivir como un partido normal", completó bajando los decibeles.
Por el lado de la Academia, su entrenador Juan Manuel Llop tuvo muchos problemas para definir al equipo debido a las lesiones. Adrián Bastía no podrá jugar porque tiene una tendinitis en el tobillo derecho. Su lugar será ocupado por Matías Sánchez. La baja del Polaco se suma a la del defensor Marcos Cáceres, quien en la práctica del martes chocó con Arrieta y sufrió un traumatismo en la rodilla derecha. A pesar de los inconvenientes y las críticas al plantel, el Chocho salío a bancar a los suyos: "Cada uno puede decir lo que quiera, pero ojalá que esas declaraciones haga salir el orgullo, la dignidad y la rebeldía de este plantel".
Las palabras quedarán afuera y el Rojo, quien lleva una ventaja de 18 partidos en el historial (64-46), buscará condenar a su máximo rival a pelear el descenso en la Promoción.