SEBASTIAN MANUEL CANCIO

«Las dos medallas de oro son para Junín»

Con una inocultable alegría que brotaba por todos sus poros Sebastián Manuel Cancio, expresaba sus sentimientos juninenses luego de haber ganado por segundo año consecutivo la Madison, que lo consagra como figura de las pruebas de fondo en las pistas de nuestro país.

El ciclista tuvo una actuación increíble, respetando un plan elaborado junto a su entrenador Gerardo Gabriel Crisafulli, y que sobre el final de las 200 vueltas al circuito de 250 metros de extensión y que cuando solo restaban solamente 38 vueltas para el banderazo final, salió como una catapulta del pelotón mayoritario, sorprendiendo al grueso del mismo que impávido miraba cómo se alejaba cada vez más la figura del popular «Tiburón» Cancio, alentado por una tribuna que exteriorizaba en gritos y aplausos,
Una fuga que en solo cuatro vueltas: Cancio/Bruneta, lo tuvieron al pelotón en una misma recta, los que apretando con todas sus fuerzas los pedales se atrincheraron en la cola del pelotón y desde ahí a la gloria solo quedaba un solo paso.
Sebastián de esta manera volvió a escribir una de las páginas más gloriosas de su carrera deportiva y del ciclismo juninense, ratificando que es el mejor ciclista de todos los tiempos nacido en nuestra ciudad.
-Sebastián ¿qué fin de semana, te pasó de todo?
«Es verdad pasé por todos los períodos imaginables. El jueves con una fuerte dolencia estomacal, considero que son los nervios que me traicionan, que me obligó el viernes a ser atendido por un médico. Justamente comenzaba el campeonato y yo con todos estos contratiempos, corrí la serie de la persecución individual y andaba con dos kilómetros menos, perdiendo de esta manera la posibilidad de estar en la final.
A las 18 se corrieron las vueltas puntuables, considero que podía haber clasificado mucho mejor porque tuve la oportunidad de sacar dos giros de ventaja, pero la gente fiscalizadora consideraron que había conseguido solo una, circunstancia por la que al final se armó una larga discusión con la gente de la Asociación Sanjuanina de Ciclismo, que airadamente protestaron esta determinación que no sólo perjudicó a mi persona sino a otros pedalistas que venían en la fuga conmigo. Me clasificaron sexto, considero que es una ubicación interesante.
¿El sábado no estábamos seguros que siguieras compitiendo?
«El sábado por la mañana me levanté un poco más repuesto, preferí no correr la persecución por el tercer puesto, para estar con mayor potencia para la tarde en la que se corrían las series de la persecución por equipos, tenía un compromiso con la gente de la cordobesa y el Scratch.
En la serie de la persecución por equipos donde trabajamos magníficamente con mi compañero y amigo, Guillermo Bruneta, logramos realizar el mejor tiempo, para pasar a la final conjuntamente con la representación local. Enseguida tuve que prepararme para disputar el Scratch, una especialidad donde se corre a un ritmo endemoniado y teniendo enfrente a los mejores ciclistas de nuestro país. Fue una prueba que se enfrentó con dientes apretados, vos no podés ignorar que en esta competencia son muchos los ciclistas que trabajan para los líderes de sus respectivos equipos, contra todos estos obstáculos tuve que correr, pero le puse el pecho a las balas y en el último giro salimos como una catapulta los tres: Angel Darío Colla, Juan Estebán Curuchet y yo. Fue una linda final, una definición considerada como la más vibrante de esta especialidad de los últimos años».
Enseguida ¿la final de la persecución por equipo y luego la lluvia?
«Luego de correr las vueltas puntuables, corrimos la final de la persecución por equipos, por suerte no tuvimos mayores contratiempos, rapidamente con Guillermo Bruneta, fuimos haciendo diferencia con la cuarteta local, para finalizar la prueba con una diferencia a nuestro favor de 9 segundos. Luego vino la lluvia y el temor de que el domingo no se corriera, por suerte el domingo a medio día la pista estaba seca y se comenzó con las especialidades finales».
La Madison ¿la prueba más esperada?
«A no dudarlo la Madison es la prueba más esperada, la competencia que cierra el campeonato, la prueba que catapulta a los mejores fondistas de temporada.
La carrera programada sobre 200 giros, con 10 embalajes puntuables cada veinte vueltas, comenzó dentro de un ritmo parsimonioso, para luego del primer enbalaje dar comienzo la «guerra». Los intentos de fugas eran contínuos, junto a Bruneta, nos situamos ahí adelante y a controlar cada uno de los fugados.
Durante más de 160 vueltas tuvimos que soportar y controlar los embates de Juan Esteban Curuchet/Walter Pérez y Angel Darío Colla/Marcos Crespo.
Restando un poco menos de treinta vuelta para la final y cuando observamos que les faltaba «nafta», salimos a hacer la nuestra y nos fuimos, no pudieron controlarnos y mucho menos tomarnos. De esta manera entramos a disputar el sprint final, en ese momento estabamos segundo a dos puntos de la pareja pampeana conformada por Pagani / Miranda. En el embalaje final pudimos clasificarnos segundos, conseguiendo de esta manera tres puntos, tres unidades de oro los que posibilitó treparnos de esta manera a lo más alto del podio, y ganar la prueba con una unidad de diferencia.»
Sebastián y ahora qué?
«Creo que ahora ya no tengo que demostrarle nada a nadie. Gané medallas doradas en todas las especialidades de fondo, en la Persecución Individual (1); Scratch (2); Madison (2); persecución por equipos (1) y vueltas puntuables (1), en total son siete las medallas doradas obtenidas en las últimas cuatro temporadas.
Ahora con el equipo de la Municipalidad de Bragado viajo hacia el sur para correr la «Vuelta del Valle» que comienza el próximo martes, son siete etapas y luego a descansar hasta el mes de enero que viene la temporada de ruta».
Alguien a quién para agradecer?
«Estas dos medallas de oro son para Junín, que lo llevo metido en mi corazón. Para mi familia, en especial mi esposa: María de los Angeles y mi hijo Manuel Alberto, que me cambiaron la vida, para Gerardo y «Cacho» Crisafulli; «Maxi» Riva, Doro Alciati y para mi hermano Alberto, un hincha incondicional. (R.J.F.)

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