Pablo Ledesma, quien sufrió un esguince de grado 2 en la rodilla derecha al chocar con el defensor de Unión Española Jorge Ampuero, aseguró que le faltó "inteligencia en esa jugada" y admitió que "se podría haber evitado". El jugador aclaró que "no hubo mala intención para nada. Fue una jugada desafortunada y al final de todo fue con bastante suerte para mí".
"Con todo lo que uno se está jugando, octavos de la Copa, uno no quiere dar ninguna pelota por perdida. Si me hubiera frenado… No me medí en esa pelota", reconoció el mediocampista. El jugador estará entre 30 o 40 días fuera de las canchas.
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