NI SILVA NI FONTANA PUDIERON CON EL PLAY OFF DE TURISMO CARRETERA

A Gabriel Ponce de León lo apremia el valor relativo que tiene la estadística

En tres semanas, cuando finalice la fase regular del torneo de Turismo Carretera, los play-offs van a cumplir parte de la tarea para la cual fueron diseñados dos años atrás: asegurar máxima paridad para la definición del título, en la última carrera del año y entre la mayor cantidad posible de postulantes.

Dos años atrás, y contando con el viento a favor de alguna carrera especial, Juan Manuel Silva llegó a la undécima competencia del torneo 2008 liderando con 188 puntos, sobre los 142 que había amasado Gabriel Ponce de León, una diferencia de 46 puntos que representaba el 22 por ciento de la cosecha lograda por el chaqueño.
Dos temporadas después, sin carreras ni puntajes especiales, Ponce de León se erigió en la fuerza dominante del TC, con un auto de probada prestación, básicamente igual al auto del campeón Emanuel Moriatis, pero al que, mano a mano, le ganó 9 de las 10 clasificaciones disputadas en lo que va del torneo.
Ponce de León y Moriatis son los líderes de la tabla, pero el juninense, que sumó 174,5 puntos en una decena de pruebas, le lleva a su compañero de equipo 53,5 puntos, el 30 por ciento de lo que recaudó. Es decir, en términos relativos, una diferencia más abrumadora que la de Silva en 2008, la que motivó la creación de los play-offs.
En las épocas en que el campeonato era "plano", antes de la instauración de la Copa de Oro, en general bastaba con un promedio de 16 puntos por carrera para ganar el título. La racha de Ponce de León habría permitido, en esa circunstancia, augurarle el halago casi sin riesgo de equivocación. Estas comparaciones no son odiosas: Silva llegó a la undécima carrera del 2008 con un promedio de 17, 09 unidades por competencia; el de Ponce de León es, hasta el momento, superior: 17,45.
Sin embargo, en esta encrucijada, el reglamento le cambia a Ponce de León ese 30 por ciento plus sobre Moriatis por apenas 7 puntos de ventaja para encarar las últimas cinco carreras del año, el sprint final del campeonato.
"Son pocos puntos para arrancar los play-offs y especialmente si lo comparamos con el que se clasifica 12º, que por ahí termina a 70 puntos y arranca la definición apenas siete abajo", se lamenta el piloto de nuestra ciudad. Tendría que haber más puntos y en una escala, para así valorizar lo que se hizo en este primer tramo". ¿Setenta puntos? ¡Más! En este momento, el último clasificado para la Copa de Oro es el Gurí Omar Martínez, con 80,50 puntos (apenas el 46 por ciento de lo producido por Ponce de León), ¡94 puntos menos!
 Terminante como ha sido en este certamen desde la tercera carrera del año y salvo en Posadas, ha venido sumando más de 17,5 unidades por fecha- resulta evidente que esa superioridad no le permite ponerse a resguardo. Literalmente, no le alcanza para sentirse tranquilo. Tiene que ir por más.
La carrera de 9 de Julio, el 5 de setiembre, cierre de la fase regular, no tendría que ser el objetivo. Pero sí las tres programadas a continuación: Trelew (una incógnita para todos), Olavarría y Paraná, dos circuitos cincuenta y cincuenta para la marca del óvalo. Si Ponce de León realmente cree que "la tercera es la vencida" y que será el primer ganador de la etapa regular en quedarse finalmente con la corona, esas tres carreras deberían transformarse en terreno fértil para confirmar, en la nueva planilla de números, el grado de superioridad mecánica del conjunto.
Será, también, la última instancia que tendrán los rivales para cazarlo al piloto del Lincoln Sport Group.