Ponce de León arribó 20º en Bahía Blanca

Con un marco de público imponente, el puntero del campeonato, Omar «Gurí» Martínez, se quedó con el triunfo en la Carrera Final disputada en el autódromo «Ezequiel Crisol» de Bahía Blanca. El entrerriano defendió su lugar -había partido desde la pole position producto de la inversión de lugares en la Carrera Clasificatoria- y de esta manera aumentó su ventaja en la punta del campeonato, que ahora lidera con 168 unidades. En segundo lugar llegó su escolta en el torneo, el representante de Racing, Emiliano Spataro, a poco más de medio segundo. En tanto, Marcos Di Palma y Guillermo Ortelli - ganador de la Carrera Clasificatoria - pelearon hasta el final por el último escalón del podio, que finalmente quedó en manos del de Arrecifes. Daniel Cingolani, que había llegado quinto, fue recargado por un toque a Gustavo Tadei y en consecuencia terminó noveno. El debutante Carlos Okulovich tuvo una buena tarea y llegó undécimo, y así logró sumar unidades en ambas carreras de la fecha. La próxima fecha -la novena- se llevará a cabo el 23 y 24 de septiembre en el autódromo «Eduardo Copello» de San Juan. Además del gran espectáculo en pista, hubo fiesta motivada por la cantidad impresionante de público que se acercó al autódromo. Los primeros cálculos indican que alrededor de 20.000 personas se dieron cita en el «Ezequiel Crisol» de Aldea Romana para disfrutar de la octava fecha del campeonato argentino de Top Race V6. El secretario general del Sindicato de Empleados de Comercio, Ezequiel Crisol, se mostró feliz por la convocatoria. «Me hace acordar a los grandes años del autó-dromo. Hace mucho, pero mucho tiempo que no veo una cantidad de público como la que vino hoy al Top Race», aseguró el dirigente. A su vez, Alejandro Urtubey, presidente de la categoría, se refirió al tema: «Me encanta que la gente se siga acercando a la categoría. Todavía no existimos en comparación del TC y el TC 2000, pero dando estos pasos estamos generando nuestro propio lugar. Nosotros no competimos contras ellas (las otras categorías), sino que intentamos ser una alternativa distinta». Como Marcos llevó los colores de Olimpo, dos futbolistas del plantel estuvieron visitándolo. El defensor Mauro Laspada y el goleador Ismael Blanco giraron en el Mercedes Benz Pace Car y se acercaron al público, al que regalaron galletitas, yerba y gorras. «Hasta hoy creía que sólo Maradona generaba tanta pasión en la gente, pero Marcos me sorprendió. Después de Diego, nadie mueve tanto como Marcos», aseguró Laspada. Se vivió una situación curiosa y divertida cuando Blanco llegó al box de Marcos, ya que se acercó y le pidió que le firme una gorra, pero Marcos -si bien aceptó gustoso- no lo conoció. Recién cuando Laspada intercedió, ambos se presentaron. Como antesala del debut en la próxima fecha, en San Juan, se hizo una exhibición de la Copa Fiesta.

El «Chango» Fernandino y el humorista Carlos Sánchez -que anunció que evaluará incorporarse a la nueva categoría antes de fin de año - manejaron los autos por el circuito. Diez personas fueron sorteadas entre el público y giraron a bordo de los Fiesta conducidos por Julio Catalán Magni y Juan Cruz Pisandelli. Christopher Daniele, el niño maravilla que sorprende con su habilidad para hacer «jueguitos» y que es la mascota oficial de la categoría, recibió ofrecimientos de gente de los Estados Unidos para llevarlo al automovilismo norteamericano con la intención de mostrar lo que se hace en la Argentina en manera de promoción del automovi-lismo.

Este fin de semana se incorporaron tres clubes de fútbol al Top Race V6. Marcos Di Palma corrió con los colores de Olimpo, Brian Smith con los de Villa Mitre, y Nicolás Iglesias llevó los de Douglas Haig de Pergamino. Mucha gente de Olimpo se hizo presente con bombos, banderas y vinchas para alentar a «su» piloto, Marcos Di Palma. Hubo también, pero en menor cantidad, hinchas de Villa Mitre que dieron su apoyo a Brian Smith.

La actuación de Gabriel Ponce de León

El piloto de nuestra ciudad largó la prueba final en la fila 17 (33º posición), debido a su abandono en la carrera clasificatoria en la vuelta 14 cuando marchaba noveno. Desde el fondo le costó mucho poder avanzar, aunque pudo pasar trece autos y arribar vigésimo. Gabriel Ponce de León desertó de la primera carrera porque la presión de aceite bajó y antes de romper el motor prefirió parar.