Habló el acusado de producir fiambre con triquinosis

Gustavo Picchi, el productor que está imputado de haber elaborado chacinados con triquinosis, dijo que se siente “destruido” por la situación que le está tocando vivir y, de manera indirecta, expresó dudas sobre el procedimiento que determinó que los embutidos tuvieron origen en su establecimiento, situado en Agustín Roca.
“Más no puedo decir”, respondió cuando se le pidió que profundizara su análisis de la situación, reacción que seguramente tiene que ver con seguir los lineamientos que le trazó su abogado teniendo en cuenta que el tema está judicializado.  
Con tono de abatimiento, Picchi afirmó estar “muy apenado” por la situación que están viviendo todos los afectados por el consumo de los fiambres y en cuanto a su labor particular, que en los últimas horas quedó en boca de toda la comunidad, manifestó: “Siento que son 28 años de trabajo tirados a la basura”.
Tal como adelantó Democracia en su edición de ayer, Enrique Torres, director provincial de Fiscalización Agropecuaria y Alimentaria, dijo: “Nosotros fuimos sobre el producto y el establecimiento elaborador, que es de Agustín Roca, del señor Gustavo Pichi, quien ya está imputado por operar sin estar habilitado por el Ministerio”.
“El producto con triquina ya fue decomisado y destruido, ahora lo que hay que buscar es la fuente, el origen, ya que el producto como alimento ya fue destruido”, dijo el funcionario quien visitó ayer Junín, junto a varios especialistas de Asuntos Agrarios bonaerense.
Y ahondó: “Estamos buscando el foco animal, o sea, cuál es el animal o el establecimiento de dónde surgieron los cerdos que originaron este problema”, dijo Torres.
“No hay garantía sanitaria. La imputación primaria, por la cual obramos, es por no estar habilitado. El cría los animales, pero por el tipo de crianza, no llegó a los animales que se usan para facturas, no llegó a esa instancia, tiene madres y lechones, así que vino de afuera el cerdo”, señaló.
“Aparentemente, según declaraciones verbales, compró los animales a dos acopiadores de Rojas, así que hay dos campos productores que fueron interdictados por el Senasa y por el Ministerio de Asuntos Agrarios”, añadió.  
Y advirtió que “si se elaboran chacinados fuera de la órbita oficial de fiscalización, no estamos exentos de que aparezcan nuevos casos”.  
Hasta ayer la información oficial era que en Junín y Chacabuco había 45 casos sospechosos y dos confirmados por pruebas de laboratorio.
Desde la dirección de Regiones Sanitarias del Ministerio de Salud de la Provincia recomendaron no consumir embutidos ni chacinados de cerdo casero y sin rótulo; y consultar al médico en caso de presentar diarrea, edema alrededor de los ojos y otros signos de la enfermedad.