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OPINIÓN

El impacto ambiental de la nueva terminal

He leído con asombro las opiniones que tergiversan el estudio de impacto ambiental que se realizó con motivo de la obra de la nueva terminal de ómnibus.
Es notable la manipulación que algunos personajes hacen de un estudio serio y responsable como el que presentó la empresa contratista de las obras y, si esta no fuera la intención, estamos ante la irresponsabilidad absoluta de los que opinan desde la ignorancia.
En este sentido, cabe recordar que estos profetas nos vaticinaron inundaciones graves por pavimentar la calle Primera Junta, hoy casi deberíamos refugiarnos en los botes del Carpincho a falta del Arca como en el diluvio Bíblico.
Por ello, es necesario hacer algunas precisiones sobre la cuestión, tarea nada fácil cuando se trata de precisar en pocas líneas un estudio de más de 60 páginas.
Las evaluaciones de impacto ambiental pretenden, como principio, restablecer en la mayor medida posible un equilibrio entre el desarrollo de la actividad humana y el medio ambiente inicial que, por definición, toda actividad humana en mayor o menor medida alterará.
No se trata, entonces, de un obstáculo a las actividades, sino de un instrumento operativo para impedir sobreexplotaciones del medio natural y también del medio creado por la propia actividad humana para mejorar sus condiciones de vida (el medio social o antrópico), y un freno a las acciones deteriorantes que atenten contra su sustentabilidad.
Cada proyecto, obra o actividad ocasionará sobre el entorno en que se ubique una perturbación, la cual deberá ser gerenciada en base a los estudios de impacto ambiental que se realicen, tanto para  minimizar sus efectos negativos, como para maximizar sus efectos positivos.
En el caso que nos ocupa, se ha considerado que el proyecto:
-Se trata de un terreno con escaso arbolado y cubierta vegetal en el suelo, donde se encuentra instalada una pista de atletismo.
-Implica la localización de una Terminal de Transporte Automotor de Pasajeros con una ubicación estratégica, ya que se encuentra en un cruce de rutas Nacionales y Provinciales y de acceso al Centro Turístico por excelencia de la región.
-Se prevé que trabajen en la misma 70 personas afectadas a distintas tareas y que arriben y partan 140 ómnibus de larga distancia más 34 de media distancia con un total de aproximadamente 4.300 pasajeros diarios.
-Propone un uso absolutamente compatible con los actuales de la zona.
Se necesita esta relocalización porque la ubicación actual de la terminal de ómnibus de larga y media distancia genera situaciones conflictivas en el tránsito urbano por la presencia de vehículos de gran porte en el centro de la ciudad. Además, la complejidad del acceso desde las rutas provoca que varias empresas no ingresen a la ciudad por la gran pérdida de tiempo que ello genera, y la demanda actual supera el número de boleterías y andenes.
El traslado permitirá recuperar, para su puesta en valor, un sector degradado, destinándolo a un paseo público y de compras, con sala de espectáculos y viviendas. De este modo, se prioriza la modernización urbanística de la ciudad, acorde a su crecimiento socioeconómico, y se continúa con el mejoramiento del paisaje urbano llevado cabo con la recuperación de los paseos públicos y la remodelación del área centro ya realizados.
La ubicación del predio permite un rápido acceso a distintos sectores de la ciudad, al empalmar la Av. de Circunvalación con las arterias de penetración y enlace del casco urbano; se encuentra estratégicamente en el cruce de rutas Nº 7 y 65 con el acceso al Parque Natural Laguna de Gómez y la Av. De Circunvalación de la ciudad, que empalma con la ruta Nº 188.
Asimismo, el arbolado es escaso, y la superficie de la actual pista es impermeable.
Su entorno se compone de un destacamento policial caminero, estaciones de servicios, salones de fiestas y eventos, complejos deportivos, lugares para la venta de camiones y maquinaria agrícola, y para la exposición rural e industrial.
El impacto en el tránsito de la zona es mínimo porque las rutas circundantes poseen capacidad de carga óptima y no se producen apropiaciones de circulaciones indebidas.

“Impacto ambiental en las terminales de pasajeros”

Etapa de Construcción. En lo atinente al movimiento de maquinarias pesadas es esperable durante el período de utilización de las mismas, por sus características operativas, una afectación del suelo, la pureza del aire y la biota, un impacto negativo de baja magnitud y temporal.  
Con motivo de las excavaciones y movimientos de suelo, es esperable, producto de la remoción de suelos, un impacto negativo de baja magnitud y temporal sobre la pureza del aire, la biota y los aspectos visuales relacionados con el paisaje, debido a la generación de polvo y remoción de gramíneas del suelo vegetal.
Etapa de Operación. La gran mayoría de los beneficios están vinculados con el mejoramiento del tránsito urbano, con un mejor servicio de transporte a partir de su incremento y de una mejora sustancial en el confort de los viajeros; así como también en la recuperación de un predio céntrico que podrá ser destinado a otros emprendimientos que lo mejoren urbanísticamente. Al mismo tiempo, la mayoría de los impactos resultan de carácter permanente.
Respecto del tratamiento de líquidos cloacales, serán descargados a la red colectora de obras sanitarias municipales, por ello se considera que el impacto esperable es positivo, de baja magnitud y de carácter permanente sobre la seguridad y salud de la población.
En cuanto a los riesgos de contaminación, el funcionamiento de las terminales de ómnibus siempre generan algún tipo de contaminación, propio de las acciones que en ella se desarrollan (comedores, estacionamiento de vehículos, acceso y egreso de unidades de autotransporte, riesgo de derrame de hidrocarburos), por ello es esperable respecto de la calidad del aire, recurso hídrico superficial, biota, seguridad y salud de la población, un impacto negativo de baja magnitud y de efecto temporal. Y respecto del nivel de ruido, un impacto negativo de media magnitud de carácter permanente.
Respecto de la descarga de tránsito urbano, que trae aparejada la desactivación de la terminal de ómnibus emplazada hoy en el Área Central de la ciudad, es esperable un impacto positivo de media magnitud y permanente sobre la infraestructura de servicios y un impacto positivo de magnitud alta y de carácter permanente sobre la calidad de vida urbana.

“Valoración de la matriz de impactos”

Como es de esperar en la puesta en marcha de proyectos de obras civiles, los impactos negativos se dan mayoritariamente durante la etapa constructiva y son, en general, de carácter temporal, mientras que los de carácter positivo se dan en la etapa operativa, cumpliendo con el cometido esencial de la obra, y son de carácter permanente.
De los 25 impactos positivos, 18 son puntuales y 19 son de tipo permanente. En cuanto a su magnitud, son de alta 1, de media 10 y de baja 14.
De los 28 impactos negativos, todos son puntuales. Hay 26 impactos de tipo temporal, que se dan durante la etapa constructiva, mientras que los 2 restantes son permanentes. 25 son de baja magnitud y 3 de magnitud media.
Como se ve, los impactos negativos son mayoritariamente leves y en la etapa de construcción, lo cual indica que los cambios debidos a la obra no serán significativos.

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