POR LA DEVALUACIÓN DEL DÓLAR

Comercios locales restringen las ofertas y aumentan los precios de sus productos

Referentes del empresariado local admitieron que las operaciones comerciales ingresaron en un stand by para esperar la reestructuración del valor final de los productos.

La devaluación que se produjo el jueves del peso ante el dólar y más aún los anuncios oficiales que realizaron el jefe de Gabinete Jorge Capitanich y el ministro Axel Kicillof, dieron un giro a la situación de varios sectores de la actividad económica juninense como por ejemplo la venta de automotores, el comercio de diversos rubros y también en el supermercadismo. 

Este giro se evidenció en la salida del mercado de la venta de automotores cero kilómetros ante la falta de una referencia de tarifas. Directamente no se venden vehículos nuevos porque no se sabe a qué precios venderlos. 

Democracia habló con algunos referentes del empresariado local, quienes admitieron que las operaciones comerciales ingresaron en un stand by para esperar la reestructuración del valor final de los productos.

El presidente de la Sociedad Comercio e Industria de Junín, Jerónimo dos Reis, dijo haberse enterado de que en los sectores donde hay cadena de producción, ésta se ha parado para ver “cuál será el costo último de los insumos que se utilizan para llevar adelante sus elaboraciones”.

“También sé de vendedores que han esperado que las casas matrices les den el valor final de la mercadería. Lo he observado en negocios que venden materiales para la construcción y alimentos balanceados”, precisó el dirigente.

Dos Reis opinó que “esto se va a terminar reacomodando y que la mecánica de compraventa se va a restablecer porque el propio mercado lo va  a demandar, no se pueden pagar los sueldos ni hacer frente a todos los costos que conlleva sostener un comercio si no se libera de nuevo la venta al público”.

“Yo creo que en días se va a volver a acomodar la operatoria comercial”, resaltó.

De todos modos, se mostró preocupado por lo que acontezca a futuro, teniendo en cuenta, por ejemplo, que todavía no están finalizadas las discusiones salariales pero a pesar de eso habrá incremento de sueldos.

“En uno o dos meses van a empezar a tratarse las paritarias y hay que ver dónde va a quedar parada la economía cuando se terminen de cerrar los acuerdos por la recomposición de haberes”, señaló el titular de la entidad que aglomera a decenas de firmas juninenses y de la zona.


Esperando la reacción del mercado


Por su parte, Elio Imperatori, experimentado referente del sector automotriz, reconoció que los exponentes de ese rubro están “a la espera de ver cómo reacciona el mercado”.

“Yo tengo varias de estas situaciones, y la experiencia indica que el coche nuevo sufre más los aumentos. Por ejemplo, en los autos importados ya habíamos tenido un incremento importante y ahora se agrega esto de la devaluación, así que una persona que va a comprar un BMW o un Mercedes se va a encontrar con una diferencia enorme entre el precio que le habían pasado un par de semanas atrás y el que rige ahora”, comentó.   

En ese sentido, puntualizó que los agencieros abocados solo a comercializar unidades de alta gama son los que peor la van a pasar, porque “se van a encontrar con que no quedan clientes para ellos”. 

No obstante, reconoció que la incertidumbre se expande a todos los vendedores locales: “Me encontré con algunos de mis colegas y no sabemos qué decirnos, estamos abriendo porque es nuestro trabajo y nada más. O sea, si alguien viene a buscar un auto que sale entre 30.000 y 40.000 pesos se lo vendemos porque el precio no varía tanto, pero de ahí para arriba empiezan las dudas”, admitió.


Fuerte incertidumbre


La incertidumbre por la situación económica del país y las últimas medidas del gobierno respecto de la devaluación del peso y la liberación parcial del cepo cambiario, produjeron la especulación por parte de los comerciantes. Algunos subieron los precios, otros redujeron cuotas y dejaron de vender algunos productos. 

Es que la moneda local registró el jueves su peor caída de los últimos 12 años al perder un 11 por ciento, ante una fuerte demanda del billete verde que excede la oferta. Este viernes cedió un 0,06 por ciento a 8,015 pesos por dólar.

“No podemos dar ningún tipo de información. Hay un silencio enorme por parte de los propietarios y una psicosis generalizada. Pero la realidad es que no sabemos qué va a pasar”, dijo el gerente comercial de un local juninense.

Otros advierten que la gente está comprando sin dudas pero los precios no están expuestos porque en cualquier momento serán modificados. “Intentamos trabajar con el costo de lista, pero estamos esperando las órdenes de modificar los precios. Estamos seguros que los valores no van a bajar, pero sí subirán”, destacó un vendedor. 

Los productos más baratos no fueron modificados pero los grandes electrodomésticos evitaron dar a conocer sus valores el día viernes. Heladeras, cocinas, calefones, equipos de música, aires acondicionados, computadoras y televisores LED sin letreros.

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