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APAGONES REITERADOS EN DISTINTOS BARRIOS DE JUNÍN

Ya son cuantiosas las pérdidas por los cortes de luz en viviendas y comercios

La rotura de electrodomésticos y la pérdida de mercaderías en numerosos negocios, generaron una costosa erogación que no estaba en los cálculos de las decenas de damnificados que dejaron hasta ahora las fallas en el suministro eléctrico.

Gesto adusto y tono de bronca se combinan por estas horas en decenas de vecinos y comerciantes de Junín. Y no es para menos: los constantes cortes de luz que se vienen registrando desde mediados de la semana pasada en algunas partes del casco urbano terminaron por romper artefactos eléctricos, cuya reparación requiere una inversión mínima superior a los mil pesos, y también arruinaron la mercadería en numerosos negocios gastronómicos.    
El problema arrancó leve, con algunas interrupciones temporarias del suministro en la última semana del año. Después, incluso en jornadas donde la temperatura acarició los 40 grados y los equipos de aire acondicionado estuvieron a pleno, esas anomalías no volvieron a manifestarse y todo parecía indicar que el servicio se había encarrilado de manera definitiva.
Sin embargo, de diez días a esta parte la falla se volvió una tortura para no pocas familias, y las consecuencias un calvario mayor aún. Es que el hecho de estar sin luz y no poder siquiera enchufar un ventilador fue el mal menor frente a derivados como la quemadura de los equipos de aire, de freezers y heladeras, y la putrefacción de alimentos.
“La amargura que tengo es increíble”, resume Hugo Seija, propietario de la carnicería “Cosas nuestras”, con domicilio en Pastor Bauman 438. La seguidilla de cortes ocasionó la rotura del equipo completo de frío y por eso tuvo que tirar casi toda la carne.
“Perdí cerca de veinte mil pesos de mercadería, el motor del equipo no me va a costar menos de cuatro mil pesos, por el conector me pidieron mil pesos y la mano de obra me va a salir otros mil. Así que entre una cosa y la otra, en un día quedé treinta mil pesos abajo, porque estoy seguro que esto no me lo va a reconocer nadie. La empresa no te atiende cuando llamás para avisarle que no hay luz, así que menos me va a dar bolilla si le reclamo que me paguen lo que perdí. De todos modos, voy a hacer la denuncia”, dijo Seija, adelantando las acciones a seguir contra la empresa Edén.
La ofuscación también se hizo sentir en la voz de una mujer, Rosana, habitante del barrio San Francisco de Asís, quien habló de la situación que viene padeciendo junto al resto de los residentes en la zona comprendida por calles Ángel María De Rosa, Uruguay, Edison y Bauman. “Acá nos vienen cortando la luz casi todos los días desde el inicio de esta semana, de las 11 de la mañana hasta las once de la noche. Hoy (por ayer) nos volvió a pasar lo mismo, pero tuvimos más suerte, la energía volvió a las 18”, le dijo la mujer a este diario.
Idéntica situación se vive en un tramo del Barrio Belgrano, más precisamente en el que circunda a la plaza sarmiento. “El jueves de la otra semana empezamos a sufrir cortes que van de la una a las cuatro de la tarde y de las cinco de la tarde a las ocho de la noche. Es una locura porque aparte de no poder aguantarse el calor, a una familia que vive en calle Bernardo de Irigoyen, entre Padre Ghío y Siria, se le quemaron dos equipos de aire, a mi hija –con casa sobre calle Italia- le quedó la computadora fuera de servicio y otra gente se quedó sin heladera y sin freezer”, comentó Enrique, quien llamó desesperado a la redacción del diario pidiendo que los casos se den a conocer para que “alguien haga algo”.     

Furor en  las redes

En las redes sociales, los apagones se transformaron en el tópico más desarrollado de las últimas 72 horas, y se hace un cálculo sumando todas las pérdidas que han dicho tener los usuarios de facebook y twitter más las expuestas por quienes le comentaron su experiencia a Democracia, la suma de la erogación total causada por el inconveniente eléctrico ya alcanza el mote de millonaria.
“Después de 30 horas sin luz, vinieron los de Edén, trabajaron un minuto y medio y volvieron el cable (que rompió una rama del plátano que Meoni no quiere cortar) a su lugar. Por supuesto, antes, perdimos todo lo que teníamos en el freezer y la heladera y estuvimos sin dormir dos noches enteras”, manifestó indignada María Urquiza, de Pueblo Nuevo.
Carlos Ojeda, de barrio 9 de Julio, no se quedó atrás al momento de exponer su enojo: “Edén y la rep… que te p… Perdí todo, televisor, reproductor de DVD, aire acondicionado y computadora. ¿Quién me va a pagar todo eso?”, manifestó con evidente desazón.

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