“Nunca viene mal argumentar por qué son tan importantes para el ser humano, lo que no quiere decir que todas sean maravillosas, sino que sin instituciones no hay sociedad. Por eso, recordar el sin sentido que se establece en el sujeto cuando las instituciones se desvanecen”.
En el marco de los 30 años de democracia –cuyo aniversario se cumplió el miércoles-, referenció la importancia de esta y de las instituciones que la comprenden y el agujero negro que quedó en las relaciones inter generacionales y en el tejido social con los dramáticos hechos vividos durante la dictadura.
Más adelante abordó la complejidad de las relaciones entre grandes y chicos: “Trabajar esta relación entre los más grandes y los más pequeños haciendo preguntas y ensayando recorridos para entender qué se pone en juego en estos proyectos de futuro, en los que muchas veces se proyectan héroes o las promesas del mañana, y en realidad luego se ve que están siendo poco cuidados y uno constata que numerosas políticas para la infancia dejan a los niños a la intemperie y descuidados”, indicó.
“No se puede pensar la infancia por fuera de la relación con los adultos, por fuera de los discursos que los adultos producen sobre la infancia, que imponen a las infancias sobre las prácticas concretas, institucionales, políticas. Las infancias son reveladoras, analizadoras de un modo de entender la relación entre grandes y chicos y en particular de un modo de ser, ejercer, estar siendo, oficiar de grandes. Entendemos que la infancia es siempre relacional. La mirada tiene que ser una mirada reflexiva hacia los adultos. No se puede sacar la infancia del marco de tramas relacionales”.
CHARLA ORGANIZADA POR EL PEPSAM
Graciela Frigerio abordó el complejo marco de las relaciones intergeneracionales
Graciela Frigerio inició la interesante y amena conferencia –brindada el jueves pasado en la sede de la Unnoba Junín- realizando un homenaje a las instituciones y en este sentido remarcó la importancia de reflexionar sobre el sentido de las mismas.
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