Seis empleados de seguridad vial fueron echados por el Departamento Ejecutivo. Esta persecución que sufren día a día los empleados municipales no es aislada, sino todo lo contrario, responde a una política optada hace tiempo por el gobierno local. En los corralones, por ejemplo, no reconocen al sindicato ATE y persiguen a sus afiliados, mucho menos reconocen a los delegados electos democráticamente.
A esto se suma la denuncia que un empleado de seguridad vial realizó contra el encargado de dicha agencia Daniel Kelly (ex agente de la Policía Federal) por coimas y por dejar seguir en un operativo a un conductor conocido que, aparentemente, no se encontraba en condiciones de circular.
Estas persecuciones y despidos no hacen más que confirmar la denuncia que el Partido Obrero viene haciendo hace años: la municipalidad de Junín es la principal precarizadora y ‘negrera’ de trabajadores, con sueldos que no cubren ni la mitad de la canasta familiar. Los empleados despedidos se encontraban con contratos precarios.
Ahora bien, la respuesta del sindicato fue intentar dialogar y denunciar ante el ministerio de Trabajo, pero nunca llamó a parar a los trabajadores municipales por la reincorporación de los mismos, dilatando en el tiempo el problema e intentando desmoralizar a los agentes. Esto es perfectamente entendible cuando los sindicatos no se organizan de manera independiente del gobierno y los partidos patronales.
Desde el Partido Obrero en el Frente de Izquierda llamamos a todos los trabajadores Municipales a organizarse y luchar por: la inmediata reincorporación de los compañeros despedidos; el cese de la persecución; el pase a planta permanente de todos los contratados; un sueldo igual a la canasta familiar; un sindicato independiente del gobierno y los partido políticos patronales. Fuera Kelly!
COMUNICADO DEL PARTIDO OBRERO
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