Carlos Molina dijo que el empleo informal es una “asignatura que sigue pendiente”

El subsecretario del Ministerio de Trabajo bonaerense, Carlos Molina, encabezó ayer a la mañana en Junín, una jornada de trabajo con delegados regionales de esta cartera provincial, con el objetivo de actualizar la situación del empleo en cada distrito y abordar temas que tengan vinculación con las dificultades y oportunidades que puedan surgir de la actividad de cada dependencia.
Estuvieron presentes en el encuentro, el director provincial de Inspección, Raúl Ferrara; el director provincial de Delegaciones Regionales, Jorge Gómez de Saravia; la delegada Regional de Junín, Gabriela Guillermón; y sus pares de Chacabuco, Joaquín Yannibelli; de Pergamino, Osvaldo Bessone; de San Nicolás, Marcelo Herrera; de San Pedro, Paula Taurizano; y de Baradero, Fabián Liaudat.
Durante el transcurso del encuentro, Molina afirmó: “Con lo grande que es la Provincia, resulta fundamental el trabajo local, y es por ese motivo que el Ministerio de Trabajo tiene presencia institucional en todo el territorio, a través de las 46 delegaciones regionales y las 43 subdelegaciones”.
Y agregó: “Sumamos a esa presencia permanente, la tarea que realizan los coordinadores regionales que hacen las veces de intermediarios entre las delegaciones y nosotros y como tercer nivel de contacto nuestras visitas al territorio”
“Más allá de que mantenemos contacto fluido con todos los delegados, a través de otros canales, nada reemplaza al cara a cara, y es por esto que mantenemos estas reuniones regionales de coordinación”, explicó el funcionario del gobierno provincial.

“Faltan inspectores”

En una entrevista con DEMOCRACIA, ante el planteo de la falta de inspectores del Ministerio de Trabajo para controlar el proceso laboral, Molina afirmó: “Más allá de que uno de los objetivos que se busca es trabajar lo más conjuntamente posible con organismos nacionales, ya sea el Ministerio de Trabajo, la AFIP o los organismos locales o municipales, a fin de aunar esfuerzos desde el sector público, sabemos que arrancamos con déficit”.
“Hace unos años –recordó- el área administrativa de Trabajo fue desmantelada, en línea con el desmantelamiento que sufrió todo el mundo del trabajo, en función de una política deliberada. Nosotros somos concientes de los límites que tenemos en materia de inspección: en este momento contamos con doscientos inspectores para toda la Provincia; y así tuviésemos el doble o incluso el triple, serían insuficientes”.
En esta línea, el subsecretario afirmó que en la actualidad están en “el doble” del número de inspectores con el que inició su gestión. “Duplicamos las inspecciones en Salud y Seguridad; en esto ha ayudado mucho un convenio que suscribimos con la Superintendencia Nacional de Riesgo de Trabajo, que nos da un programa de inspecciones: ellos reciben los reclamos por parte de las ART, la Superintendencia nos lo traslada y nosotros realizamos las inspecciones, en función de eso también nos financia el sueldo de inspectores”.

La importancia de denunciar

Molina destacó la importancia de la denuncia pública ante el Ministerio, frente a casos de empleo irregular. “Facilitamos las vías de acceso para la denuncia del trabajo irregular, dimos importancia a la informatización, de tal modo que hay un único canal o registro de denuncia, a través del 0800 666 2187”, afirmó. “Para nosotros la denuncia es ganar tiempo, efectividad. Es imposible cubrir todo el territorio bonaerense con sólo doscientos inspectores, en cambio los sindicatos, nuestros propios delegados o cualquier habitante puede hacer una denuncia, anónima, pero comprometida porque está denunciando una irregularidad, un incumplimiento a la normativa laboral o de seguridad e higiene. Hasta el propio trabajador afectado también lo puede hacer. La denuncia genera una inspección y a veces, llegamos de esa manera a lugares donde sería muy difícil llegar, o se llegaría de casualidad”, explicó.
“Es necesario que el conjunto de la sociedad esté concientizada de la importancia que significa, como factor de inclusión social, que un trabajador esté regularizado, porque así está protegido por las leyes, por su sindicato, que le comprende el alcance de la Convención Colectiva de Trabajo que corresponde”, dijo.
“Argentina está viviendo una situación que no conocíamos 20 ó 30 años atrás, el mero hecho de tener trabajo no significa estar por encima de la línea de pobreza, puede estar trabajando pero en negro, no incluido”, advirtió.