Tras el inicio del juicio abreviado por el caso de robo de armas que estaban secuestradas, bajo custodia por parte del Ministerio Público Fiscal del Departamento Judicial Junín, el Tribunal en lo Criminal N° 1 del mismo departamento deberá resolver el veredicto (culpable o no culpable), y eventualmente la sentencia (pena a cumplir).
Seguramente la resolución de los jueces del Tribunal, será dado a conocer en los próximos días. Al parecer, las armas “desaparecieron”, pero estaban secuestradas bajo la responsabilidad del Ministerio Público Fiscal con asiento en Junín, por lo cual se podría deducir que fueron hurtadas y vendidas, si es que no volvieron a “aparecer”.
Las partes involucradas en este proceso judicial son la Fiscalía por un lado, y los acusados por otro, uno de ellos pertenecía al Poder Judicial, y el otro al Servicio Penitenciario, este último con complicidades aparentes de familiares oriundos de San Nicolás, donde supuestamente fueron a parar las armas.
Lo cierto es que no se hizo público el debate oral que estaba previsto para ayer, porque hubo acuerdo de partes y se hizo un juicio abreviado. No hubo juicio oral y público.
Aparentemente además de armas, había municiones y otros elementos secuestrados, que “desaparecieron” desde adentro del edificio que ocupa el Ministerio Público Fiscal de la provincia de Buenos Aires, en Junín.
Se estima que en los próximos días, el Tribunal dará a conocer a la sociedad en qué quedó esa causa, cuál fue la resolución, qué pasó con las armas, quiénes las hicieron “desaparecer”, si hay responsables dentro del ámbito de la Justicia y del Servicio Penitenciario, o por el contrario, si no pudieron encontrar culpables y el asunto queda aún por resolver.
Un hecho del 2022
La causa fue elevada a juicio en diciembre de 2023 y gira en torno a un grave episodio de sustracción de pruebas dentro del ámbito del Poder Judicial.
Según se había informado, el proceso iba a comenzar ayer e iba a permitir el esclarecimiento de las maniobras por la cual cuatro personas —tres hombres y una mujer— habrían logrado hacerse con armas, municiones y dispositivos electrónicos que estaban bajo resguardo judicial, para luego presuntamente comercializarlos.
La investigación del por entonces fiscal, doctor Esteban Pedernera, se inició en 2022, cuando algunas personas comenzaron a acercarse al edificio San José, del Ministerio Público Fiscal bonaerense, para recuperar legalmente armas que les habían sido secuestradas en distintos procedimientos.
Sin embargo, se encontraron con la sorpresiva respuesta de que esos elementos ya no se encontraban disponibles. A partir de allí se desplegaron distintas diligencias que permitieron identificar a los presuntos responsables.
Durante el debate que finalmente no se realizará, se esperaba conocer con precisión la cantidad de armas robadas, el tipo de municiones y demás elementos sustraídos, así como también su posible aparición en hechos delictivos posteriores y en qué contextos. Asimismo, se preveía la incorporación de declaraciones testimoniales, escuchas telefónicas —que fueron numerosas—, análisis de mensajería de teléfonos intervenidos y el grado de responsabilidad de cada imputado.
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