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JEFATURA DISTRITAL DE LA POLICIA DE LA PROVINCIA DE BUENOS AIRES

Vizcaíno González justificó la labor de contención social que tiene asignada

Salió al cruce de las críticas de fomentistas y señaló que el concepto de que la policía debía sólo prevenir el delito y esclarecer los hechos delictivos es «arcaico y ortodoxo».

El inspector Fabián Vizcaíno González, jefe distrital de la Policía de la provincia de Buenos Aires, hizo referencia a la nueva función que tiene la policía de la dar «contención social» a jóvenes y niños, a tal punto de organizar actividades como regalar juguetes para Reyes, llevarlos a pasear al Balneario, o recolectar útiles escolares para destinarlos a los niños en marzo próximo.

Sobre el concepto de que la policía debía dedicarse a prevenir y esclarecer los hechos delictivos era arcaico, ya que ahora en el mundo había otras ideas para solucionar el tema de la seguridad. En diálogo con DEMOCRACIA, el jefe policial respondió a planteos que hicieron públicos algunos fomentistas de nuestra ciudad por la falta de presencia policial en los barrios alejados del centro de la ciudad.

Para Vizcaíno González, los policías están en los barrios, como el Prado Español, 9 de Julio, Ntra. Sra. de Luján, Padre Respuela (en realidad se llama Gregorio González) , Pueblo Nuevo, Evita y en todos los barrios que por el mapa del delito consideraban que debían estar.

«No los puedo tener en forma simultánea en toda la ciudad pero sí dentro de cinco meses cuando se incorporen los otros 50 policías más. Vamos a tener 100 policías permanentemente en las calles», acotó. Según lo manifestado por el jefe policial, tal situación era el resultado de una campaña de reclutamiento que se hizo en la Distrital tiempo atrás, por la cual llevan incorporados hoy por hoy 77 nuevos policías, y prometen poner en actividad medio centenar más.

«Esto se ve reflejado en las calles, dando sustento a lo que en el mundo se denomina Policía de Proximidad, una nueva modalidad de hacer prevención que es por zonas geográficas determinadas, por un grupo siempre determinado de policías, y con el contacto permanente con el vecino», dijo.

Estos agentes pueden hacer contravenciones de tránsito, prevención de delitos menores, como cualquier otra eventualidad que vaya surgiendo. «En Junín tenemos hoy las doce cuadrículas, que proximamente serán ampliadas a 14 ó 15, los bicipolicías y el personal de caminantes, que quizás llaman más la atención. De acuerdo a las prioridades que van surgiendo vamos colocando a los efectivos, esto quiere decir que dentro de seis meses, cuando haya otros 50 más, vamos a tener presencia en todos los barrios simultáneamente, ya que hoy los vamos alternando», explicó.

Reclamos

Mientras tanto algunos fomentistas reclaman mayor seguridad en las calles, con policías de a pie o en móviles, donde se juntan las «barritas» de jóvenes para beber, o en lugares oscuros de las calles que pueden ser centros de delito. Ante este planteo, el inspector Vizcaíno manifestó: «la causa principal de la violencia urbana y la inseguridad, no es la pobreza sino la desigualdad social. Vemos generalmente que la ciudad ofrece un abanico de posibilidades, a los que muchos jóvenes no pueden acceder a eso y se ven limitados. Hay jóvenes que a diario no pueden ir a confiterías o espectáculos porque el costo de la entrada es de 25 a 30 pesos entonces se quedan en el barrio tomando una cerveza. Este es un país libre. Ahora si vemos que han violado alguna norma jurídica o administrativa ahí va a estar el accionar policial».

«Arcaico y ortodoxo»

«Hoy en día sabemos que la policía por sí sola o junto al poder judicial no pueden solucionar el tema de la inseguridad, entonces debe intervenir la comunidad, entonces estamos abiertos a todos los barrios, a las distintas sociedades de fomento también hacemos contención social», aseguró el inspector distrital.

Ante el planteo que para el tema de la contención social había organismos especializados cuya función era precisamente esa, en tanto que la policía debía actuar en la prevención del delito y el esclarecimiento de los delitos que sucedían, el inspector Vizcaíno respondió: «la función de la policía es mucho más amplia. El que usted me plantea es un concepto arcaico y ortodoxo y no se usa en todo el mundo. Yo el 17 de febrero tengo el honor de ser designado por el ministerio para ir a Barcelona a completar mi master en seguridad. He estado en octubre de 2006 en Viña del Mar donde me reuní con jefes policiales de toda Latinoamérica y Europa y el concepto de la policía incluye el acercamiento a la comunidad, en que el Estado debe invertir en Seguridad Social, de la contención de los jóvenes marginados que no han delinquido aún. Es la policía del siglo XXI y vamos camino a eso».

«Hoy Junín es una ciudad delictualmente tranquila entonces podemos hacer esta actividad de contención social (juntar y dar juguetes a niños de los barrios, o llevarlos a pasear al balnerario). A mí no me interesa la opinión de ciertos fomentistas que siempre tratan de poner palos en la rueda y demás, vamos a seguir en esta función», dijo.

Respecto a que las instituciones que tenían por ley la función de ser intermediarios entre la comunidad y las fuerzas policiales, como los Foros de Seguridad, tendían a desaparecer porque sus dirigentes se consideraban desatendidos o no se ponían de acuerdo entre ellos, Vizcaíno González expresó: «tenemos un acercamiento total con las sociedades de fomento. Lo demostramos cuando realizamos la entrega de juguetes para Reyes, y ahora, en el Balneario tenemos 50 chicos en actividades recreativas, y hay una madre por cada sociedad de fomento con los policías en el Balneario. También se prevé la recolección de útiles escolares, para que los chicos cuando empiecen las clases vayan con los útiles necesarios». «Con esto no estamos desatendiendo la seguridad. Precisamente la sociedad de fomento del Parque Natural ‘Laguna de Gómez’, cuyo presidente es Miguel Chami, ha realizado gestiones importantes ante mí y con el municipio, y desde La Plata hemos traído un vehículo 0 km, una ford Ranger, para el Parque Natural», informó. En cuanto si en el balneario realmente hacía falta un nuevo móvil para patrullaje, y si estaba marcado como zona de riesgo en el mapa delictual, el jefe policial dijo que el balneario era la vidriera de Junín y que hacía dos años había sido mencionado en un expediente judicial de un caso de secuestro de personas por parte de la banda del Oso Peralta, y que en el 2006 también se habían hecho rastrillajes por el caso del desaparecido Jorge Julio López. «Nuevos patrulleros, 0 km, son necesarios en toda la ciudad, pero hoy, el Ministerio de Seguridad lo ha destinado para el Parque Natural», apuntó. Retomando el tema de la nueva función policial, la contención social, se le preguntó al inspector distrital si habían tomado contacto con organismos del estado que estaban abocados a ese tema, ya sean desde el Municipio, el Departamento Judicial Junín, o el CPA (Centro de Prevención de las Adicciones), respondió que estaban «conectados permanentemente con el Poder Judicial, al igual que con el Municipio, a tal punto que en la contención que estamos dando ahora en el Balneario había profesores de Educación Física y Asistentes Sociales trabajando con los chicos».

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