Ayer, en el Parque Natural Laguna de Gómez, confluyeron la Bienal POSVERSO de Junín y la BIENAL SACO de Antofagasta, Chile, en una actividad que consistió en la presentación de tres obras in situ, instaladas en el paisaje natural.
La exposición se tituló "La poética de la aridez" y contó con curaduría de la gestora cultural polaco-chilena Dagmara Wyskiel, directora y curadora de la Bienal SACO, la cual acontece en Antofagasta y San Pedro de Atacama.
En diálogo con TeleJunín, la artista brindó más detalles de esta iniciativa que se realizó en el marco de la Bienal de Poesía Experimental, que estará vigente hasta el 30 de noviembre en diversos espacios culturales de Junín y de Agustín Roca.
En ese sentido, Wyskiel destacó que las obras “no serán presentadas en una sala, sino que vamos directamente a la Laguna de Gómez para entrar en contacto directo con la naturaleza”. “Son obras que cruzan justamente la palabra y el concepto”, añadió.
Una de ellas fue “Mi cuarto, cuatro paredes” de Graciela González, de Bolivia, “quien nos devolverá a los tiempos de la pandemia y nos encerrará con ella en su habitación del tamaño de una hoja de máquina de escribir y con paredes de palabras, para acordarnos de nuestras propias rutinas de aquel apocalipsis”, aseguró.
También estuvo presente la dupla Colectiva Poética de la Urgencia, Paula Carmona y Nicolás Cox, de Chile y México, con su obra “Arrebatado”, a través de la cual “cuestionarán el espacio que le damos a las banderas”, indicó.
Y, por último, se presentó “Paisajes volátiles” de la artista polaca Anna Uścińska, quien con “siete espejos redondos acostados en la tierra –en el fondo seco de la laguna– reflejará el cielo, como lo hacía antes la superficie del agua”.
Según explicó, “son tres obras con mucha presencia de mujeres de diferentes países y culturas que están unidas por su capacidad impresionante como artistas de enfrentar el paisaje”. “Todas esas obras se han realizado a lo largo de la Bienal Internacional SACO en Antofagasta en diferentes ediciones y son selección mía, como curadora, elegir esos trabajos pensando en la Laguna de Gómez”, detalló.
De Polonia a Chile
Dagmara Wyskiel arribó desde Polonia a Chile -más precisamente a Antofagasta- con el desafío de “trabajar y crear obras”.
En relación al desierto de Atacama, lo definió como “un espacio absolutamente especial para construir, para investigar, para trabajar con la escala en contexto existencial; así que es una fuente de inspiración permanente”.
“No trabajamos con obras envasadas, importadas, sino que todas las obras de la Bienal SACO se producen en la ciudad de Antofagasta con ayuda local, con gente y materiales locales”, destacó.
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