-Hay un pedido muy fuerte para que Cristina sea candidata, se reversiona la consigna del peronismo “Luche y vuelve”, ¿qué lectura hace?
-Consideramos que Cristina está proscripta y que no hay una democracia plena, porque el Poder Judicial está condicionando la posibilidad de elegir a los candidatos que queremos. Cristina genera expectativas porque cualquier vecino sabe que, entre 2003 y 2015, vivió sus mejores años, posteriores a la vuelta de la democracia, con capacidad salarial, con buena capacidad de consumo, con la posibilidad de adquirir un terreno y hacerse su casa, irse de viaje, cambiar el auto, estar bien y tener mucho más trabajo.
-¿No cree que es ambiguo el posicionamiento de Cristina: por un lado es la vicepresidenta, pero por otro se despega de su propio gobierno?
-Cristina fue la estratega, fue la persona que eligió a Alberto Fernández y claramente no se hizo honor a eso. La conductora del Frente de Todos es Cristina Fernández de Kirchner. Alguien que tenía muy poca intención de voto, termina siendo presidente, gracias a la estrategia electoral que planteó Cristina, siendo ella la candidata con mayor caudal de votos, entonces, es complicado, porque además la línea de gobierno que planteó Cristina no es la que se ejecutó después. Lo dijimos en su momento, respecto al rol de Martín Guzmán como ministro de Economía. A fines de 2020, en un acto en La Plata, Cristina planteó que la Argentina iba a crecer, pero dijo que había que generar políticas para que no se la lleven cuatro o cinco vivos, sino que se distribuya entre los trabajadores, para llegar al famoso fifty-fifty (50 y 50 por ciento). Cristina es parte de una alianza de gobierno, en la cual no se está respetando el caudal político y electoral de cada una de las partes; quien más decisiones toma es quien menos caudal electoral tiene.
“La línea de gobierno que planteó Cristina no es la que se ejecutó después”.
-¿Cree que el Presidente tiene que declinar una eventual candidatura?
-Alberto tiene que tener una señal de grandeza y ser funcional a lo que necesita el Frente de Todos, que es tener la mejor herramienta electoral. Y, hoy, la mejor herramienta no es que él sea candidato.
-¿Cómo conceptualiza la gestión de Sergio Massa en Economía? ¿Cree que es uno de los presidenciables del FDT?
-El compañero Massa está haciendo malabares, está haciendo un gran trabajo, después del desastre que dejó Martín Guzmán, y de un acuerdo con el FMI que es impagable, que no lo va a poder pagar ningún gobierno. Por eso planteamos que la salida de un préstamo político, que se otorgó para que Macri no pierda las elecciones, lo tiene que resolver la política. Hay que generar condiciones para que se rediscuta ese acuerdo. El tiempo terminó dándonos la razón, el ministro Guzmán hizo las cosas muy mal, y el ministro Massa está haciendo malabares para mejorar la economía, logró estabilizar en buena medida la macroeconomía y, de a poco, se están estabilizando las cuestiones micro económicas. Él ha expresado que no es su intención ser candidato, que está abocado a la gestión, y si más adelante decide que quiere ser candidato, y están dadas las condiciones, será una discusión que tendrá que dar el Frente de Todos. Mientras tanto, hay que elogiar la política económica que está llevando adelante, en contraposición al desastre económico de Guzmán.
"Cualquier vecino sabe que, entre 2003 y 2015, vivió sus mejores años"
-¿Preferiría que haya una sola lista del FDT en Junín?
-Vamos a trabajar para tener la mejor estrategia electoral, pero obviamente quien no esté de acuerdo, puede presentarse a elecciones.
-¿No es contradictorio que Cristina y La Cámpora sigan estando en el Gobierno?
-El descontento abarca a la mayoría de los que estamos gobernando, tanto la provincia de Buenos Aires, como la Nación. Estamos hablando de los principales gobernadores, de los principales dirigentes del país, los sindicatos, los referentes de las organizaciones políticas. Si miras el plenario de la provincia de Buenos Aires de ‘Luche y vuelve’, del sábado pasado, ves que están todos los dirigentes, todos los sindicalistas. En todo caso, habría que ver por qué Alberto, estando tan solo, sigue sin hacer lo que le decimos todos, siendo el sector minoritario del Gobierno. El descontento con el albertismo no se reduce a La Cámpora y Cristina, son muchos más y habría que poner al 90 por ciento de los barones del conurbano, y no creo que sean de La Cámpora.
COMENTARIOS