En el contexto del Día mundial del reciclaje -que se conmemoró ayer-, el espacio vecinalista de Junín denominado “Renovación”, que conduce Juan Pablo Montanaro, colocó varios recipientes para el almacenamiento de las colillas de cigarrillos. “Hemos observado y estudiado que los fumadores no tienen un lugar para tirar las colillas de cigarrillos, y que se tiran en el piso”, advirtió el dirigente local. Y amplió: “Esto arrastra grandes complicaciones para el medio ambiente, ya que una colilla de cigarrillo puede contaminar entre 8 y 10 litros de agua marítima y unos 50 litros de agua dulce, sin dejar de lado que tarda aproximadamente una década en degradarse y en su proceso hay muchos animales que las ingieren”.
“También nos parece importante recordar que el cigarrillo contiene cerca de mil sustancias químicas, como nicotina, alquitrán, cadmio y benceno, entre otras, que son sumamente tóxicas si llegaran a la tierra o el agua”, advirtió.
Los depósitos fueron colocados en la Plaza 25 de Mayo, Barrio Belgrano, Club Junín, 9 de Julio y en la Plaza de los Niños (Sesquicentenario), situada en avenida San Martín y Rivadavia. “Nos hubiese encantado abarcar más espacios, pero por una cuestión de presupuesto no lo hemos podido hacer, tal vez con nuestra iniciativa, el Municipio, directores de clínicas, presidentes de clubes y dueños de bares copien esta idea y puedan colocar más de estos depósitos y entre todos poder cuidar el medio ambiente”, afirmó Montanaro.
Ladrillos ecológicos
“Nos hemos puesto en contacto con una empresa recicladora. Una vez por mes nos comprometemos a vaciar los recipientes y enviar las colillas a la empresa, para que se hagan ladrillos ecológicos”, dijo. “Para finalizar, quiero agradecer al empresario juninense Claudio Perkusic por apoyarnos desde ya hace varios años”, cerró.
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