La juninense Lilian Almeida -radicada en Canarias- expresó que están viviendo un “duro momento” a raíz de la erupción del volcán Cumbre Vieja, ubicado en la isla de La Palma que, según el Plan de Emergencias Volcánicas de Canarias (Pevolca), la actividad “se estabiliza y mantiene comportamientos constantes”, una “noticia positiva porque no seguirá afectando nuevas construcciones”.
“Nosotros estamos bastante alejados porque la isla de La Palma está más al oeste a unos 400 kilómetros, pero se siente como si fuese aquí mismo. El sentimiento de acompañar a los palmeros es muy grande desde nuestra isla”, afirmó Almeida en diálogo con TeleJunín.
“Tal es así que se han desplazado bomberos y protección civil desde hace unos días. Nuestras islas son volcánicas y las que están con posibilidad de tener erupciones están en permanente atención y vigilancia”, reconoció.
“Ya sabían que esto podía pasar. Creyeron que tenían mucho menos metros cúbicos de lava de lo que ha soltado, por lo que ha sorprendido. Se han engullido más de 600 casas y es duro”, expresó.
“Uno piensa que nunca va a pasar. La última vez fue hace 50 años y ahora nos tocó y hubo que superarlo. Gracias a Dios estaban preparados y no hubo riesgo de vida, pero pueblos completos y cultivos fueron arrasados”, subrayó.
“La lava se deslizó en forma de catarata hacia el mar y está dejando ahora la isla, que va a aumentar su tamaño cuando se enfríe con el contacto del agua. El gas tiene mucha cantidad de azufre y ese es otro de los peligros que se esperaba”, concluyó.
“Se estabiliza”
“El volcán se estabiliza. Mantiene comportamientos constantes y la lava discurre por una única colada. Es una noticia muy positiva porque no seguiría afectando a nuevas construcciones”, tuiteó Cabildo de La Palma (órgano de Gobierno) en su cuenta, de acuerdo a la información provista por Pevolca.
También, indicó que “existe una menor sismicidad que en días anteriores y una posible" reducción "en la deformación del terreno”.
El director técnico de Pevolca, Miguel Ángel Morcuende, sostuvo en un video publicado en Twitter por el órgano de gobierno de la isla, que “la aparición de un tubo lávico entre el volcán y el mar es una noticia positiva” y esto está “permitiendo un contacto muy fluido entre el centro emisor y la zona de detección en el mar”.
“Esto es una buena noticia porque, en principio, asegura que el ancho de la colada no aumente”, explicó.
Morcuende subrayó, que en la semana, “el número de sismos y su magnitud han disminuido” y además “se están produciendo a profundidades medias-altas, es decir, de 10 a 15 kilómetros”.
También, informaron que “la superficie afectada por las coladas es de casi 422 hectáreas” de las cuales “93,4 corresponden a cultivos. Concretamente, 35,6 hectáreas son fincas de plataneras, 32,9 hectáreas de viñas, 6,7 hectáreas de aguacateras, y las hectáreas restantes corresponden a otro tipo de cultivos”.
Además, hubo 214 personas evacuadas en el hotel de Fuencaliente.
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