Los concejales se reunieron en el HIGA.
SEGUNDA OLA

Preocupa la falta de especialistas para atender a pacientes con coronavirus en Junín

Concejales de JxC se reunieron con directivos del Hospital Interzonal, que es centro de derivación de la Región Sanitaria III. Reconocieron la escasez que existe en cuanto a médicos y enfermeras capacitadas en la atención de personas con coronavirus en terapia Intensiva.

En la mañana de ayer, los concejales Javier Prandi, Manuel Llovet, Melina Fiel y Graciela Blaiotta, integrantes del Bloque Juntos por el Cambio Junín, se reunieron con las autoridades del Hospital Interzonal General de Agudos "Doctor Abraham Félix Piñeyro” Dr. Sebastián Meneses, Cristina Tejo, Mario Scebola y Juan Pezzi.
Reconocieron la escasez que existe en cuanto a recursos humanos capacitados en la atención de pacientes que sufren de Covid-19 (médicos y enfermeras) en el área de Terapia Intensiva. 
En ese sentido, desde el Bloque ratificaron su postura de ponerse a disposición para colaborar, desde su rol, en la gestión de incorporación de más recursos para ampliar la capacidad instalada del Hospital.
Al finalizar el encuentro, el concejal Javier Prandi expresó que la reunión fue positiva: “Todos coincidimos en que la vacuna, los testeos, el aislamiento y la prevención es lo más importante. Tenemos las expectativas puestas en la llegada de más vacunas y que la gente pueda seguir inscribiéndose para recibirla”.
“Estamos trabajando en la importancia de concientizar a los vecinos para que se inscriban para poder vacunarse cuando lleguen las dosis que hacen falta. Desde ya que hubo importantes demoras en la vacunación, eso es un hecho, y hoy estamos todos muy preocupados”, expresó Melina Fiel.

“Fatiga terminal”
Según analizó el médico referente de la Sociedad Argentina de Terapia Intensiva (SATI) y jefe de ese servicio en el Sanatorio Otamendi,  Arnaldo Dubin,  el personal intensivista capacitado está atravesando una “fatiga terminal”, con mal descanso, agotados, frustrados y desbordados. 
“Esto impacta directamente también en los resultados de la terapia intensiva en la evolución de un paciente internado. Por eso, sube la cantidad de muertos. Si uno sale a correr, se cansa. Y por más voluntad que ponga para seguir corriendo, va a ir más despacio. Eso mismo pasa en las UTI hoy en el país, donde por más voluntad que ponga, los pacientes se van a morir más”, ejemplificó el especialista.
“Los intensivistas —enfermeros, kinesiólogos, médicos, otros profesionales y no profesionales— ya éramos pocos antes de la pandemia, trabajábamos precariamente y con la Covid-19 fue todo un desastre. Estamos diezmados por la enfermedad; un montón se contagiaron, algunos no han vuelto a trabajar, otros fallecieron, otros no quieren hacer más terapia intensiva. La carga de trabajo es descomunal. Estamos exhaustos física y anímicamente”, subrayó. 
“Lo que te puede transmitir cualquier persona que trabaja en una terapia intensiva pública o privada de la ciudad de Buenos Aires es que estamos al límite, no solo en el número de camas ,sino fundamentalmente en el estado del personal. Las terapias intensivas viven un clima horrendo”, concluyó.