agua mineral envasada
Agua mineral envasada.
SALUD PÚBLICA

Nuevas medidas para reducir la presencia de arsénico en el agua mineral natural

La medida, conocida recientemente, obedece a una resolución dictada por las secretarías de Calidad en Salud y de Alimentos, Bioeconomía y Desarrollo Regional y disminuye de 0,2 a 0,05 mg/l el nivel máximo permitido de arsénico en agua mineral natural.

En vistas de establecer una estrategia para la prevención de enfermedades, se estableció una nueva medida regulatoria que reduce el máximo de arsénico permitido en el agua mineral natural, que por supuesto también se aplicará a las aguas minerales que se comercializan en Junín.
El secretario de Calidad en Salud de la Nación, Arnaldo Medina, junto con el titular de la cartera de Agricultura, Ganadería y Pesca, Marcelo Alos, resolvió esta medida que “disminuye de 0,2 a 0,05 el nivel máximo permitido de arsénico en el agua mineral natural, una medida regulatoria que acentúa las estrategias para la prevención de enfermedades” y fue publicada el 27 de enero del corriente año, en el Boletín Oficial tras una nueva definición de “agua mineral natural”, para entrar en vigencia un día después: https://www.boletinoficial.gob.ar/detalleAviso/primera/240117/20210127.
Por lo expuesto, las empresas productoras de agua mineral embotellada de la Argentina deberán observar las nuevas indicaciones oficiales respecto a la pureza del agua para reducir al máximo la presencia de arsénico, un elemento que se relaciona con el desarrollo del cáncer.
Estudios epidemiológicos demuestran que “el consumo de agua con elevada concentración de arsénico se relaciona con el desarrollo de cáncer en varios órganos, en particular la piel, la vejiga y los pulmones”.

Vigencia
La norma entró en vigencia el 28 de enero del corriente año, por lo que los elaboradores deberán ajustarse a los valores establecidos por la nueva normativa.
Para realizar la modificación de la normativa, el Grupo de Trabajo ad Hoc de Contaminantes Inorgánicos del Instituto Nacional de Alimentos (INAL), dependiente de la Anmat, "realizó un estudio sobre normativa y publicaciones científicas recomendados por organismos de referencia como la OMS", dijo Medina.
En este sentido, el funcionario detalló que el Laboratorio Nacional de Referencia del INAL "efectuó un monitoreo de las aguas comercializadas en el mercado, cuyo resultado concluyó en una recomendación a la CONAL sobre la necesidad de actualizar la normativa".
Según el Código Alimentario Argentino (CAA), se entiende por agua mineral natural un agua apta para la bebida, de origen subterráneo, procedente de un yacimiento o estrato acuífero no sujeto a influencia de aguas superficiales y proveniente de una fuente explotada mediante una o varias captaciones en los puntos de surgencias naturales o producidas por perforación.

Junín
En Junín, el área de Bromatología no recibió todavía ninguna comunicación oficial al respecto, pero se estima que primeramente la resolución debería ser cumplida por las empresas productoras  de agua mineral embotellada, teniendo en cuenta el nuevo límite máximo de arsénico. Este límite sería el que también fija la provincia de Buenos Aires para el agua de red que consumen los vecinos bonaerenses, es decir, 0,05 (de difícil cumplimiento en las zonas donde los acuíferos están contaminados con arsénico).
“Cuando se modifique esa proporción tendremos que comunicar a todos los comercios cuáles son las nuevas características que deben tener las aguas minerales comercializadas, expuestas en la correspondiente etiqueta de la botella”, manifestó la fuente consultada.
Nuestra ciudad, en décadas anteriores, fue centro de un arduo debate sobre este tema, que incluso llegó a la Justicia, la cual ordenó al municipio que cumpliera el límite máximo de arsénico permitido. En este punto, la mezcla de agua de distintos pozos para lograr que el nivel de arsénico fuera menor significó y significa una ardua tarea.
En la actual época estival, cuando la gente consume mucha agua, de red y embotellada, vuelve a surgir el tema. La nueva medida dispuesta por el Gobierno nacional da esperanzas de que por lo menos se pueda poner coto al nivel del mencionado mineral en las aguas embotelladas, para un consumo mucho más seguro.

Antecedentes
El grupo ad hoc “Arsénico en el agua”, de la Red de Seguridad Alimentaria, del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), el 31 de julio de 2018 dio a conocer un informe para la Comisión Nacional de Alimentos (CONAL).
En este señala que “la presencia de arsénico en el agua de bebida es un problema serio en Argentina, dada las implicancias sobre la salud ampliamente descriptas en la literatura, que van desde lesiones en la piel hasta cánceres dérmicos y de órganos internos” y que “debe tenerse en cuenta que no existe tratamiento curativo para HACRE y sus manifestaciones clínicas”.

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