ricardo tamburini
“Fueron dorados recién el día que dimos la vuelta olímpica”, recuerda de su paso en Sarmiento.
HISTÓRICO DIRIGENTE DEPORTIVO DE NUESTRO MEDIO

Ricardo Tamburini: “Sigo sufriendo y gozando de la misma forma”

Estuvo en Sarmiento, donde participó activamente en el proceso que llevó al club por primera vez a la “A”. También fue presidente de Ciclista Juninense, al cual tiene un amor especial: “es el club de la familia”.

Ricardo Tamburini criticó en algún momento el manejo del fútbol profesional de Sarmiento a través de un artículo periodístico. Tras ello, fue llamado para colaborar y, desde entonces, se convirtió en un activo dirigente deportivo de nuestro medio, que participó principalmente en el Verde y Ciclista Juninense.
Su pasión por Sarmiento se vislumbra apenas emite las primeras palabras en la entrevista. “Es parte esencial de mi vida. Aún hoy, en épocas de reposo por la edad, sigo sufriendo y gozando de la misma forma. El llanto cuando perdimos la última final- que no pude ni quise controlar- certifica mis sentimientos. Fue delante de todos, contra el alambrado, como corresponde al hincha común que soy”, resalta.
“Al club llegué por pedido de Chelo Fernández. Justamente en Democracia escribí una nota donde cuestionaba el manejo del fútbol profesional, publicación que no gustó para nada a la Comisión Directiva presidida por Sabella. Chelo, con suma inteligencia, me ofreció que hiciera con el fútbol lo que decía en esa nota. Mi ego, supongo, no me permitió retroceder y así acepté semejante tarea”, recordó.
Tras ello, participó activamente en lo que fue el primer ascenso de Sarmiento a la Primera división, pero el cual no fue un camino sin espinas. “Fueron dorados recién el día que dimos la vuelta olímpica. Hasta allí la desazón y la angustia tuvieron un rol preponderante. Era, para ubicarnos, como un laberinto, o encontrábamos la salida o todo hubiere sido espantoso. Felizmente la luz apareció”, resaltó.
Con relación al proceso, Tamburini no dejó de señalar el trabajo de sus compañeros para llegar a la máxima divisón del fútbol argentino, al cual calificó como “el mejor grupo que haya conocido”. 
“La Comisión de Fútbol la integraban Francho Benito, capaz y maravilloso dialoguista; el Vasco Martingorena, con su experiencia y capacidad para enfrentar situaciones; Rodolfo Ganci, super importante por sus aportes y presencia en todos los momentos; y Rodolfo Ibarra, siempre atento y con apoyo incondicional a la gesta”
Mención aparte hizo a Ernesto Sabella, entonces presidente del club, al que calificó como un apasionado por la institución: “Pocho era sarmientista de verdad. Su vida pasaba por el club que añoraba. Esa era su gran virtud. Desinteresado, cumplió un rol importante más allá de sus presidencias. Tenía muchos amigos poderosos y sabía que podía contar con ellos. Chelo Fernández, por su parte, era el dirigente más inteligente y su principal consejero”.
 
Ciclista
Su relación con Ciclista comenzó de mucho antes, desde niño, aunque no era directivo. “Fue desde chico mi club de barrio. Además, allí jugaba Totón Conte, a quien admiraba y se había transformado en mi ídolo. El amor fue creciendo y escribiendo su propia historia. Es el club de la familia, desde mi madre a mis hijos y nietos”.
Pero su vida como dirigente deportivo del club de avenida San Martín comenzó más tarde, ya de adulto. “Me retiré de Sarmiento en 1982 al finalizar el campeonato que nos salvamos del descenso y perdió la categoría San Lorenzo. Me sentí cansado tras dos años intensos. Tuve la sensación de haberme demostrado que se podía, que mi pensamiento no era utópico”.
“Pero mi cansancio duró poco. Carlos de Rosa, presidente de Ciclista, me convocó para ayudar a formar un plantel competitivo y, de ser posible, lograr un campeonato. También en ese momento la suerte me acompañó”.
Es que, en 1984, Ciclista derrotó a Argentino de visitante en la final del torneo y terminó con una racha de veinte años sin salir campeón. “Era un equipo que ya anticipaba un futuro increíble. Un año después ocupé la presidencia con el Torneo Federal ya empezado, era la C una categoría para clubes nuevos. Habíamos salido tres veces campeones locales y en el campeonato ideado por León Najnudel debutamos y ganamos en La Plata. Ascendimos pero, como presidente, supuse que no podíamos arriesgar tanto económicamente y renunciamos”. 
Como una siembra, Tamburini destaca que “Ciclista compitió desde ese entonces de manera consecutiva, sin ausencias temporales, lo cual le asigna una consigna deportiva. Poquísimos son los clubes que ostentan tal cumplimiento”.

La dirigencia
Para Tamburini, los dirigentes nacen y también se hacen. Es que, según él, “existen pequeños que muestran ciertas características de liderazgo y, actuando como tal, tienen un rol directriz dentro de su entorno. Dado su carácter, muestran auténticas dotes para liderar y motivar. De grande y con las herramientas que otorga el conocimiento y la propia sociedad, bien podrían ser directivos de valía.”

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