En una carta pública, clínicas del interior, agrupadas en la asociación civil Salud Federal, dieron a conocer la situación que atraviesan en el marco de la pandemia y las consecuencias de cara al futuro inmediato de muchas instituciones de salud.
Democracia dialogó con el médico Norberto Petraglia, director de Clínica La Pequeña Familia, quien dio detalles del reclamo y la problemática que afrontan.
Según indicó Petraglia, “Salud Federal surgió como una asociación espontánea de muchas clínicas del interior profundo del país (Rosario, Buenos Aires, Comodoro Rivadavia, General Roca en Río Negro, Catamarca y Córdoba). Es una asociación civil con aspiraciones de ser la entidad que nos represente tanto en negociaciones paritarias como en las negociaciones de aranceles con las prepagas y obras sociales”.
“Nos empezamos a reunir por Zoom, un poco por la situación muy dura que estamos atravesando las instituciones médicas por la pandemia y sus varias causas. Primero por lo que implica atender a los pacientes Covid, segundo, por la gran retracción de la gente, un poco por temor de atender sus patologías comunes, descuidando un poco el control de sus problemas”, explicó.
“Y a ello se suma un gran problema económico financiero vinculado a la falta de acompañamiento de los financiadores de salud, llámese las prepagas que no ajustaron sus valores durante todo este año”, refirió.
Preocupación de cara al futuro
Petraglia destacó la ayuda del ATP aunque refirió que tiene fecha de vencimiento.
“Es una situación difícil de sobrellevar. El interior se hace cargo de la atención del 70% de la población del país. Existen otras entidades intermedias que teóricamente nos representan pero nosotros sentíamos que no representaban al interior del país”.
El profesional aseguró que la carta “es un clamor para visibilizar que la pandemia no ha sido igual para todos. Ha habido ganadores y perdedores. Los financiadores, llámese prepagas y obras sociales han ganado porque esta retracción de la demanda de la gente ha hecho que ellos no gastaran lo mismo que gastaban antes”.
“El ATP tiene fecha de vencimiento, posiblemente hasta diciembre y después hay que ver como se sobrevive. La idea del reclamo es poner en conocimiento de la población que existe esta asociación y visibilizar la situación caótica en que se nos presenta el futuro inmediato”.
El comunicado
En un fragmento de su comunicado, Salud Federal asegura que “la mayoría de los financiadores de la salud: PAMI, obras sociales provinciales, nacionales, sindicales, y empresas de medicina prepagas (en especial estas últimas) no han actuado con la solidaridad que el momento requería, ni han ajustado aranceles como habían prometido, lo que nos hubiera permitido seguir cumpliendo nuestro rol esencial en plena pandemia”.
A su vez destaca que “el trabajo prestacional desplegado ha sido arduo y la comunidad nos aplaudió cuando nos necesitó; ahora, de no mediar una modificación en el financiamiento o un incremento en los aranceles compensatorios, sucumbirá la actividad prestadora del interior del país, lo que ocasionará graves y tristes consecuencias para la población”.
Y denuncia que “en este momento crucial el Estado anuncia y se dispone a ejecutar la próxima finalización de los ATP; las empresas de Medicina Prepaga se niegan a cumplir con los acuerdos arancelarios pactados y las obras sociales y el PAMI son renuentes a otorgar mecanismos de incrementos, los que ya han sido reclamados y resultan absolutamente imprescindibles”.
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