Se presentó la reedición del libro “Problemas del Radicalismo”

La actividad se llevó a cabo el jueves por la tarde en la Sala Regino Maders de la Legislatura de Córdoba y el presidente de la Escuela Raúl Alfonsín, Alfio Germán Acosta sostuvo que “rescatar la figura de Lebensohn en estos tiempos de crisis del radicalismo en la Argentina es de suma importancia”.
 La presentación  y charla estuvo a cargo del abogado Héctor Lebensohn, quien escribió la introducción de libro bajo el título “Moisés Lebensohn como ejemplo de doctrina y acción”.
En la misma el director de Democracia hace una semblanza de Moisés, aborda –entre otros temas– a los antepasados, los libros de autoría del ideólogo radical y los que se refirieron a él, la generación radical de 1930, y aspectos esenciales del pensamiento lebensohniano: el hombre, la juventud,  su concepto de Nación, de la función de los políticos y de su primer deber.
El texto de Moisés Lebensohn se refiere a la exposición que pronunció en el V Congreso de la Juventud Radical de de la Provincia de Buenos Aires el 24 de mayo de 1942.
Héctor Lebensohn expresó que la verdadera importancia y trascendencia del Congreso residió en la pieza extraordinaria que abrió las deliberaciones. En un extenso y, a  la vez, concretísimo mensaje analizó y puso al descubierto con valentía singular los problemas del radicalismo y los vicios fundamentales que lo llevaban, en ese momento a la decadencia, señalando además los puntos que consideraba, posibilitarían la recuperación.
Ese discurso –prosiguió–cuenta con la estructura y la línea conceptual de Lebensohn.
Hay un riguroso orden expositivo y claridad en el planteamiento de los problemas y en la formulación de las propuestas, desarrollo ceñido y sintético y proporcionalidad en los tiempos dedicados a cada uno de los diversos aspectos puestos a consideración de la audiencia. Hay armonía y lógica conceptual en todo el mensaje. 
En el discurso se combinan los métodos críticos y dialécticos rigurosamente conjugados. La oratoria de Lebensohn adquiere toda su madurez, a pesar de su juventud. Bajo su inspiración creadora produjo el pronunciamiento más importante de la Juventud de la UCR. Le dio un impulso militante, un rigor ideológico democrático y un compromiso nunca antes ni después emulado.
La cuestión de la guerra europea como choque de ideas y de definiciones ante el porvenir constituye el trasfondo de la arenga.
No es el tema central, sino solo una base motivacional de la reflexión central, que es la decadencia argentina, la indefinición de las estructuras dirigentes del partido, y la necesidad de reformar profundamente las formas de militancia y los desarrollos ideológicos del  partido.
En la descripción del régimen político económico conservador y fraudulento, su valoración tiene otras connotaciones. Lo que Lebensohn critica es la impotencia de los dirigentes para resistir al régimen o para proponer una alternativa a su vigencia y permanencia.
Con los fundamentos del Congreso de Chivilcoy, escribió el Programa de la Juventud Radical de 1944, antecedente directo del Programa de Avellaneda de 1945, siendo el principal inspirador y redactor de la Carta de Avellaneda.
Allí se selló un  pacto para defender la moral, la justicia social, la libertad, la república, el federalismo, la libertad sindical, el voto femenino, la reforma educativa y una firme repulsa a toda forma de régimen corportativo.
Todos los temas  planteados en Avellaneda fueron recogidos por el radicalismo como Bases de Acción Política y Profesión de Fe Doctrinaria indicó Héctor Moisés Lebensohn.
Concluyó “es mi pensamiento que los medios pueden cambiarse por ser meros instrumentos; y sostengo que las propuestas filosóficas, ideológicas y políticas de Moisés Lebensohn, por ser clásicas, mantienen frescura y modernidad. Por lo que su lectura, discusión y difusión de obras como la que presento, implicarían una reorientación para las nuevas generaciones".
Posteriormente el disertante respondió a numerosas preguntas de los concurrentes.