RECONOCIDA DEPORTISTA JUNINENSE

Manuela Morano: “La natación es una forma de vida”

Es una nadadora de elite e integró la Selección Nacional. Compitió en numerosos sudamericanos y en dos mundiales. Asegura que este deporte “no es solamente tirarse a una pileta”, sino que enseña muchas otras cosas.

Manuela Morano tenía apenas seis años el día que estaba en una pileta y vio que su hermana se resbaló y se cayó, y su primer impulso fue lanzarse al agua y rescatarla. Fue un momento de zozobra para la familia, aunque el hecho no pasó a mayores y fue solo una anécdota. Sin embargo, su madre decidió enseguida que tenía que enseñarle a nadar. O, al menos, a defenderse en el agua.
Así nació su romance con la natación, que la llevó a los lugares más elevados de la alta competencia y a representar al país en la Selección Nacional.
Hoy, con 30 años, encabeza el ranking mundial de la categoría Máster de 30 a 34 años en 50 metros libres y está tercera en 100 metros medley, con lo que fue habilitada para competir en el Mundial Corea 2019.

“Gerardo Leonard me transmitió el amor por este deporte”.

La natación
Luego de un paso por la colonia del profesor Edgar Calvo, donde aprendió sus primeras armas en el agua, Manuela se formó en la natación con el entrenador Gerardo Leonard, del CEF N°55. “Gerardo me transmitió el amor por este deporte”, afirma hoy.
Su primer gran logro fue haber ganado el cruce de 700 metros de la Laguna de Gómez, con solo diez años.
Enseguida se enganchó con el deporte y los triunfos en distintas competencias se fueron encadenando.
“A los 13 años gané mi primer campeonato sudamericano y cuando cumplí los quince –yo ya estaba en la selección nacional– River Plate me propone irme a vivir a Buenos Aires para representarlos”, recuerda.
Ya en Buenos Aires, terminó el secundario en el Instituto River Plate y siguió representando a la institución cuatro años más. En todo ese tiempo ganó más de diez campeonatos argentinos.
Posteriormente, pasó a Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires (GEBA). Al formar parte de la Selección Nacional, el esfuerzo venía acompañado de becas de la Secretaría de Deportes de la Nación y del Cenard, más algún aporte privado, “pero nunca fue la gran cosa, este siempre fue un deporte amateur y a mucho pulmón, y el premio es el logro deportivo y el reconocimiento de la gente”.
Después de siete años en River y cuatro en GEBA, se radicó en Córdoba, donde siguió su carrera y donde, además, vive su pareja.

Máster
Como competidora de Primera, participó de campeonatos sudamericanos, de dos Mundiales, en uno de ellos hizo récord argentino. La suya fue, en definitiva, una carrera brillante.
En el último tiempo dio un paso trascendente: se pasó a la categoría Máster: “Si bien es una transición que cuesta un poco, es un desafío, algo que uno puede hacer cuando es un deportista maduro, cuando entiende que la natación –más allá de la categoría– es parte de una, que la competencia, la calidad y el compromiso los pone uno”.
A sabiendas de que la competencia en Primera “requiere otra responsabilidad, más horas de entrenamiento y estar en un clima mucho más competitivo”, se inclinó por la Máster que “es un poco más relajado, aunque hay deportistas muy importantes”.
Días pasados, la Federación Internacional de Natación oficializó a Morano encabezando el ranking de la categoría Máster de 30 y 34 años por sus tiempos en la prueba de 50 metros libre, y tercera en los 100 meadley, registros que la habilitan para competir en el certamen mundial Corea 2019.

“Este siempre fue un deporte amateur y a mucho pulmón”.

Entrenadores
Un párrafo aparte, merecen sus entrenadores. El primero de ellos, Leonard: “Yo iba a entrenar todas las tardes de 18 a 20, así fue durante los cinco años que lo hice en Junín, y Gerardo nos pasaba a buscar y nos llevaba al club. Además de entrenar, era muy divertido hacerlo. Y aprendimos un montón de cosas con él en ese crecimiento”.
En River tuvo, entre otros, al también juninense Orlando Moccagatta. Y a Alberto “Colo” Santiago en GEBA “que también fue muy importante” en su formación: “Con él fui a mi último Mundial, en Turquia, en 2012, donde hice récord argentino y fue un torneo muy importante”.
Asimismo, destaca a Héctor ‘Bochi’ Sosa y su entrenador actual, Fernando Moore.

“La natación me enseñó sobre el respeto, saber ganar y perder, la responsabilidad, el compromiso, el compañerismo, el trabajo en equipo”.

Balance
Más allá de las categorías, para Manuela la natación es una gran pasión. Con el apoyo incondicional de su familia y de su equipo en la categoría Máster, sigue adelante con su sueño.
“La natación es una forma de vida”, asegura, para luego profundizar: “Junto con mis padres, fue la actividad que me crió, mi vida gira en torno a este deporte que no es solamente nadar en una pileta, sino que también me enseñó sobre el respeto, saber ganar y perder, la responsabilidad, el compromiso, el compañerismo, el trabajo en equipo, porque el deporte genera cosas que después se pueden plasmar en otros órdenes de la vida. Por eso seguí en categoría Máster, para que siga formando parte de mi vida”.
Y al momento de establecer sus objetivos, concluye: “Competir y pasarla bien, seguir yendo a torneos, pero por sobre todas las cosas, en este momento, lo que quiero es disfrutar cada vez que me tiro al agua. Y seguir compartiendo esto que me gusta”.

COMENTARIOS