None
En las carnicerías confirmaron que bajaron las ventas por los incrementos en los precios.
LA SUMA INCLUYE LA CARNE, ENSALADAS, BEBIDA, PAN Y POSTRE

Una cuestión de lujo: hacer un asado para una familia tipo ya cuesta unos $ 1.500

El corte más popular y requerido de los argentinos para cocinar en una parrilla se transformó en un bien casi de lujo en la ciudad. Con el último ajuste en el precio de la carne vacuna, la clásica costilla y el vacío ya promedian en las carnicerías unos 320 pesos el kilo.

En una recorrida por carnicerías juninenses realizada ayer Democracia comprobó que hacer un asado ya es prácticamente una cuestión “de lujo”. En efecto, para disfrutar de un asado, una familia tipo –integrada por dos adultos y dos menores- deberá desembolsar unos 1500 pesos, entre la carne, la bebida, el pan, las ensaladas y el postre. 
Es que el año arrancó con aumentos en todos los rubros, y la carne no fue la excepción. Los precios de la carne vacuna registraron en enero pasado, en promedio, alzas del 8,5% con respecto a diciembre 2018 y le meten presión a la inflación general.
Según el último informe mensual del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (Ipcva), los distintos cortes de carne bovina mostraron ese incremento, en tanto que si se los compara con enero de 2018 ya exhiben alzas del 49,5%.
 


Las ofertas, la “vedette”
Ante esta situación, las carnicerías intentan sostener las ventas con diversas ofertas que saben que el cliente busca. Por ejemplo, en un local de Barrio Belgrano de Junín se observa un pizarrón que aclara: “Solo por hoy, costilla 150 pesos”.
 “En las últimas semanas hubo un 30% de aumento de la media res, pero tratamos como siempre de absorber un poco y al cliente trasladamos un 15%”, explicaron desde el sector a Democracia. 
En enero de este año, los principales aumentos se dieron en cortes como vacío, cuadril, falda y lomo, con una variación de entre el 10 y 11% con respecto a diciembre del año pasado. El mes próximo, en tanto, se conocerán los registros de las subas en febrero.
Los precios, “por las nubes”
Desde la carnicería de un supermercado de origen oriental situado en la zona céntrica de Junín, el encargado contó que en los últimos dos meses “cayó un 60%” la venta, y contó que el kilo de asado que en diciembre costaba 195 pesos, hoy lo comercializa a 285 pesos. “Aumentó cien pesos en dos meses”, señaló. 
“El pollo que estaba 60 pesos el kilo en diciembre pasado, hoy lo tengo que vender a 105 pesos el kilo”, indicó. “El kilo de chorizo de cerdo está 145 pesos”, precisó a este diario. En otros comercios se llega a pagar $ 200.


En otras carnicerías consultadas, el kilo de asado vacuno (vacío) trepa a 370 pesos, y el kilo de costilla, 340 pesos. En lo que es achuras, el chinchulín ronda los 120 pesos, mientras que las mollejas, $ 365. 
De esta manera, el asado para el fin de semana cada vez afecta más al bolsillo. En lo que corresponde a la carne, se estima que se necesita un promedio de 800 pesos para cuatro personas: un kilo de costillas ($350), otro de vacío ($330) y cuatro unidades de chorizo ($130). 
Es por eso que, además, la gente se empezó a inclinar por otras opciones algo más económicas, como el cerdo o el pollo.
De ahí en adelante los precios varían según las elecciones y los gustos de cada cliente, ya que si se agrega algún tipo de achura, como mollejas y chinchulines, hay que pensar en un monto más elevado.
Si bien los carniceros explicaron que en cuanto a las ventas no sufrieron una baja significativa, remarcaron que hoy los clientes compran un poco menos y "miden un poco más cuánto llevan de cada corte".
A la hora de pensar en el fuego, una bolsa de leña de 5 kilos ronda los 75 pesos, mientras que la de 20 kilogramos se ofrece más económica, en relación precio-peso, a $ 180. 
En bebidas, las gaseosas de primeras marcas de 2,25 litros rondan los 80 pesos, mientras que un vino de gama media se puede conseguir en 80 pesos. Una botella de cerveza de litro cuesta entre 60 y 90 dependiendo la marca.
Como en este país los precios varían según las cuadras, barrios o zonas, en verduras se podría precisar que el kilo de lechuga ronda los $ 120 el kilo, $ 50 el de tomate y $ 25 el de papa. En relación al pan, el kilogramo promedia unos 80 pesos.
Para paladares exquisitos, si se agrega un postre, hay que tener en cuenta que un kilo de helado ya supera los 400 pesos.

COMENTARIOS