Desmintió Ginzo que la UCR haya aprobado negociar con Lavagna ni intervenir distritos de radicales k

En su carácter de presidente de la UCR Junín, Julio Ginzo participó en la convención nacional del radicalismo, llevada a cabo en la ciudad de Rosario el sábado pasado.

Al referirse a este acto, Ginzo desmintió categóricamente a DEMOCRACIA lo publicado por la prensa, en el sentido de que «la Convención de la UCR habilitó la negociación de futuras alianzas con la mira puesta en Roberto Lavagna, al tiempo que facultó a la conducción a intervenir los distritos que no sigan una línea opositora al Gobierno Nacional», como señalaron los medios de comunicación.

Lo dicho por Ginzo

«La Convención dio dos mandatos -señaló el titular del partido radical de Junín-. Uno, muy claro y muy preciso. Y un segundo, no tanto». «El primero es que la Unión Cívica Radical debe ser el principal partido político opositor del Gobierno. Esta fue una postura absolutamente unánime y fundamentada», dijo.

«¿Por qué?», se preguntó Ginzo. «Porque nosotros consideramos que el gobierno de Kirchner es un riesgo serio para el sistema democrático. Tengo para mí que hay en marcha un proyecto absolutista. El avance que se ha hecho sobre instituciones fundamentales del sistema, principalmente en lo que hace a la división de los poderes, nos debe preocupar ahora, porque después puede ser tarde. Existe la intención de atomizar hasta la extinción  los partidos políticos. Esto supone minar un sistema que encuentra su expresión en los partidos políticos. Esto ha sido muy claro en cuanto a nuestro partido», añadió el dirigente radical»

«También en el terreno económico y social (nos debe preocupar), porque con un crecimiento (económico) de un 9 por ciento anual, esto no se distribuye en términos de justicia. La pobreza no ha disminuido», subrayó.

Conversaciones con otras fuerzas

«El segundo mandato -explicó Ginzo- le fue dado al presidente del Comité Nacional de la UCR. Y es para que inicie conversaciones con fuerzas políticas, económicas, sociales, empresariales y gremiales (así de amplio es el mandato) a efectos de encontrar comunes denominadores con vistas a la formación de un consenso político. Esto es todo. No fue más de allá. No hubo una sola mención al nombre de Roberto Lavagna».

«Desde ya -prosiguió- que en el espíritu de muchos estaba la figura de Lavagna, pero ésto pasa por una segunda o tercera leída que, de ningún modo, justifica que la prensa nacional rotule en las primeras planas, diciendo que la Convención ha autorizado la candidatura de Lavagna, o que ésta ya tiene el aval de la Convención», aclaró el presidente de la UCR Junín.

Fórmula propia

Este Diario le preguntó a Ginzo si se suponía entonces que en esta distorsión de la información se debía a alguna mano pícara.

«No lo sé -contestó Ginzo-. «Pero me llama la atención que en la Convención había periodistas importantes, así que éstos tomaron de modo directo» (lo que ocurría).  Añadió que «además, hubo un importante número de convcencionales y declaraciones presentadas a la Convención, proponiendo que el radicalismo tuviera una fórmula propia: de las juventudes de la Capital Federal y Córdoba, por ejemplo. Y los convencionales cordobeses, que estaban íntegramente a favor de la candidatura propia». «Asimismo, -señaló Ginzo- las conversaciones que tenga Iglesias, presidente de nuestro partido, después deben ser ratificadas por la Convención en una nueva reunión que se llevará a cabo a comienzos del año que viene», dijo finalmente el titular del Partido Radical de Junín.