La constante suba del dólar y la pérdida de poder adquisitivo, afectaron a distintos rubros, especialmente a los artículos de primera necesidad como el pan, la yerba mate y las verduras, los que más aumentaron en lo que va del año, de acuerdo a un relevamiento de la Defensoría del Pueblo bonaerense.
En la escalada de precios, el organismo elaboró un relevamiento en toda la Provincia que mostró una realidad que afecta a los que menos tienen: en lo que va del año, por ejemplo, las harinas subieron casi un 90%.
Como era de prever, el aumento de la materia prima provocó que en la primera mitad de este año los precios en las panaderías se incrementaran un 53,63%.
En nuestra ciudad, de un sondeo realizado por Democracia en distintos comercios del rubro se pudo constatar que un kilo de mignones, felipes o flautines cuesta entre $50 y $60 (en algunos incluye los de salvado).
Por otro lado, en algunas panaderías, el precio de una flauta varía entre $8 y $12 según el comercio y se vende por unidad. Una trincha o galleta ronda también los $12.
Consultado por Democracia, el gerente de un reconocido molino de nuestra ciudad destacó que el precio de la bolsa de harina por 50 kilogramos al 1° de enero de este año costaba $303 y hoy cuesta $580, más sus impuestos correspondientes.
Productos “indispensables”
En el acumulado anual, además de la harina de trigo común, en un 88,25%, los productos que más subieron fueron la yerba mate, un 81,19%, la lechuga criolla, un 66,27% y la batata, un 57,03%.
De la observación de los rubros se desprende que los panificados fueron los que más aumentaron, un 53,63%, seguidos por las conservas, un 31,46%, las frutas y verduras, un 24,21%, almacén, un 24,15 y carnicería, un 12,21%.
Según el Defensor del Pueblo bonaerense, Guido Lorenzino, "para los sectores más vulnerables, la harina y sus derivados son productos indispensables para su alimentación, ya que con un bajo costo pueden cubrir las necesidades diarias. Nuestro estudio muestra que estos aumentos son otro duro factor que golpea con fuerza a los que menos tienen".
El análisis, elaborado por el área de Asuntos Económicos en las 27 ciudades donde el organismo tiene delegaciones, arrojó que en lo que va de 2018 la canasta básica de alimentos subió un 17,39%.
Puntualmente, el salto registrado en junio respecto a mayo, del orden del 3,69%, fue el de mayor impacto en el año.
El noroeste, más barato
El informe de la Defensoría del Pueblo también mostró que la zona noroeste de la provincia es la que menos paga por los productos panificados.
En comparación con esta región, en la zona centro se paga un 10,79% más caro; en la zona norte un 5,94% más; en la sudoeste, un 4,12% más; en Capital, Conurbano y alrededores, un 3% más; y en la zona sudeste, un 2,02% más.
Para Lorenzino, "estos indicadores, que hablan de grandes subas para los productos que más se necesitan, se suman a los incrementos desproporcionados de las tarifas de los servicios públicos, lo que muestra la grave situación que atraviesan las personas económicamente más vulnerables".
Los más caros
En lo que va de 2018, los productos que más aumentaron en el período de enero a junio, según un relevamiento de precios que la consultora Focus Market realizó sobre 101 productos son: harina 83%; Pastas Secas 33,3%; Polentas 29,3%; Helados 24,8%, Insecticidas 23,4, Sopas 23,3%; Té 22,9%; Tapa de Empanadas 22,9%; Pastas Frescas 20, 8%; Mayonesa 18,7%; Gaseosas 13,5 % y Leche, más del 13,1%.
En tanto, los que registraron mayor aumento en junio, respecto de mayo de este año son: Harina 27,9%, Chocolates 15,5%, Insecticidas 13,3%, Pastas Secas 11,7%, Aceite 8,8%, Té 8,1%, Caldos 7,8%, Pastas Frescas 7,1%, Pañales 6%, Pan Rallado 5,1%, Papel Higiénico 5,1% y Leche 4,3%.
Cabe destacar que según los últimos datos del Indec, la inflación en junio fue del 3,7% y acumuló, en lo que va del primer semestre, una suba del 16,4%.
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