El bowling es un deporte de salón que consiste en derribar un conjunto de piezas de madera (llamados bolos, pinos o palitroques) mediante el lanzamiento de una pesada bola contra ellos.
En Junín desde hace un cuarto de siglo, existe el local Sácate donde la atracción principal es este juego, más allá de la oferta de mesas de pool y una amplia gastronomía en un salón que concurren las familias, aficionados y profesionales.
A partir de las 19, y durante los siete días de la semana, abren las puertas hasta la hora de cierre, que puede variar según la cantidad de jugadores o comensales que haya.
“Un lugar de esparcimiento”
En diálogo con Democracia, Carlos Gordillo, jugador y responsable de Sácate explicó: “El bowling tiene temporadas. Por ejemplo la de invierno es la época más alta, ya que la gente al tener un salón que es calefaccionado, la pasan muy bien. Si hace frío o llueve afuera, acá adentro estamos en remera”.
“En el verano nos rebuscamos con los chicos, que ya no van a la escuela o la universidad. Pero del año tenemos tres meses firmes que son en invierno y después dos meses en verano. Son muchos años (26) y nos vamos rebuscando”, comentó.
“La situación económica del país hace que uno se prive de ciertas cosas, pero los fines de semana trabajamos bien. Además tenemos televisores donde transmitimos partidos de fútbol.”, sostuvo.
“Se mezclan mucho las edades, dependiendo de los horarios y los días. Por ejemplo, los domingos temprano vienen familias y los sábados y viernes a la noche viene gente que juega al pool y al bowling. Después, los demás días hay un ambiente muy familiar”, explicó Gordillo.
“Además, el hecho de que haya máquinas, pooles y bowling, hace que sea el único lugar de esparcimiento en la noche de Junín”, remarcó.
En lo que respecta a la gastronomía indicó que hay hamburguesas, milanesas, lomos, pizzas y distintos tipos de minutas “que se vienen cocinando desde siempre”.
Torneo Argentino
“Del 13 al 19 de agosto tenemos un Torneo Argentino que se va hacer acá en Junín. Hace 15 días competí en un torneo en Mar del Plata y salí sexto siendo el mejor clasificado de nuestra ciudad. El torneo es organizado por la Federación, vienen todos los campeones argentinos y yo tuve la chance de llegar a la final y salir sexto”, subrayó Gordillo.
“Los torneos se siguen jugando y en Junín hay alrededor de 10 jugadores que más se destacan dentro del ámbito profesional que vienen a practicar los lunes, martes y jueves y salen a jugar a otras ciudades”, comentó.
“Hemos ganado varios torneos. Incluso la Copa Challenger la ganamos acá en Junín con jugadores nuestros. El próximo torneo de agosto es de manera individual, pero existen en grupo también. Después hay hándicap y hay hasta 12 palos de ventaja por línea que se juega”, informó.
“Normalmente siempre algún joven aparece para iniciarse en el deporte, pero no de la forma masiva que había antes con veinte turnos tomados. Ahora con suerte hay entre dos o tres turnos esperando”, indicó.
El bowling más grande de la Provincia
“Tenemos divido el salón: confitería en la entrada, los pooles al medio, luego viene otro sector de mesas y atrás las ocho canchas de bowling. Para pasar una noche, se la pasa bien, se puede comer y jugar, o comer y luego jugar”, explicó el bowlinista.
“Es un lindo ambiente y hoy por hoy sigue siendo medianamente económico. La línea de bowling cuesta 70 pesos, y el juego dura aproximadamente media hora; la ficha de pool tiene un valor de $ 50. Cabe destacar que en un tiro, tenés tres bochas y en total son treinta."
“Se reformó la parte de adelante, y el sector de la cancha también. Hay unas nuevas mesas, se pusieron unas bancas más y se trata de ir mejorando lo que se puede. Es el bowling de bochas chicas más grande de la provincia de Buenos Aires”, remarcó.
“En el juego de bocha grande es más caro y hay dos tiros por turno, por lo que se hace más corto el juego. El bowling que jugamos nosotros en Argentina es un deporte de precisión, ya que en el otro juego, las bolas y los palos son más grandes”, afirmó.
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