Cuando el viagra apareció en el mercado internacional en marzo de 1998 -y en Argentina cuatro meses después- se presentó como una nove-dosa solución para la dis-función eréctil que estaba destinada, esencialmente, a hombres mayores de 50 años. Sin embargo, poco más de una década después, los principales consumidores de ese medicamento no son los señores maduros sino sus hijos y hasta sus nietos.
La utilización de este fármaco en los muchachos de entre 20 y 30 años ha crecido de manera exponencial en el último tiempo, a punto tal que hoy en día lo consumen mucho más los jóvenes de ese rango etáreo, que los adultos mayores de 50.
Esta situación se da por el uso festivo de la medicación, ya que se supone que se trata, en general, de varones que físicamente no lo necesitan. Para muchos especialistas, la inseguridad típica de la edad, el miedo a no rendir, el deseo de ser infalibles y, en ocasiones, la necesidad de contrarrestar la disminución de la potencia sexual que produce el consumo de otras sustancias, son algunas de las razones que motivan a los jóvenes a recurrir al sildenafil -nombre genérico del medicamento- para asegurarse el éxito en sus encuentros sexuales.
Este escenario visible y palpable a nivel nacional, también tiene su correlato en Junín. Para Atilio Villani, Presidente del Colegio de Farmacéuticos de Junín, "varió la edad de la gente que lo consume. En un principio se trataba de gente mayor, pero ahora creció de manera considerable la demanda en personas mucho más jóvenes, incluso te podría decir que es alarmante que chicos de 18 ó 20 años lo pidan. En general, la mayoría son jóvenes de entre 18 y 25 años, es muy poca la gente mayor que lo viene a buscar".
Según urólogos expertos en el tema, el crecimiento en el consumo del fármaco entre los jóvenes se debe a que ellos miden su rendimiento sexual por el número de actos sexuales realizados en una sola sesión y procuran mantener esa capacidad, que se va perdiendo con el tiempo.
Estos medicamentos se los permiten porque acortan los períodos de recuperación entre un acto y otro, explican. Otro aspecto que analizan los especialistas está referido al acceso que se tiene sobre el medicamento. Aunque deben ser prescriptos por un médico, sólo el 5 por ciento de las dosis se venden con fórmula.
En la práctica es un producto de venta libre. Las normas ordenan que deben ser vendidas con receta archivada, pero en Argentina hasta se ofrecen por Internet. Desde la Confederación Farmacéutica Argentina se denuncia que existe "una liviandad preocupante en la venta que redunda en que el uso se haya masificado más de la cuenta".
Para Villani, hay una cuestión más de fondo. "Yo no sé si estaré equivocado -advierte-, pero desde mi punto de vista esto tiene que ver también con el estilo de vida que llevan hoy en día los jóvenes, el alcohol, el cigarrillo, las salidas que duran horas y horas, y eso contribuye a un cansancio corporal, con lo que, tal vez, crean que necesitan de este tipo de medicación. Yo no estoy en la noche, pero a lo mejor cambió la forma de divertirse".
Peligros
Los riesgos no derivan únicamente de su consumo mezclado con otras sustancias. La falsa creencia de que con el viagra no hace falta hacerse estudios médicos esconde, en opinión de varios expertos, importantes amenazas para la salud de todos los consumidores.
Las estadísticas que se conocen a nivel nacional ratifican una tendencia de comportamiento social que, además, delata la facilidad para conseguir fármacos que deben expenderse bajo receta. Sólo en el último año se comercializaron en Argentina cerca de 20 millones de píldoras de productos contra la disfunción eréctil. Actualmente hay a la venta 56 marcas y presentaciones diferentes de sildenafil, y desde hace bastante tiempo se sabe que la gran mayoría de los que toman estas pastillas no tienen una necesidad física o una dolencia que lo amerite.
Y los peligros de tomar una droga sin la prescripción de un profesional siempre están latentes. Villani reafirma que "todo medicamento mal usado es un riesgo enorme que, en este caso, tienen que ver principalmente con problemas cardíacos. Aparte, este estilo de vida en sí mismo ya es un riesgo, más allá de la medicación; una vida más ordenada disminuye los peligros. Esto es como agregarle más leña a ese fuego".
En el país
Los especialistas afirman que el viagra se está volviendo tan popular que muchos varones lo toman directamente para su debut sexual. Según se explica, lo hacen para asegurarse un excelente rendimiento en su primera vez y evitar así los riesgos de un "papelón".
Esta es una de las causas por las que la venta de este medicamento aumenta año a año. Como muestra basta un dato: en 2006 las pastillas que tenían sildenafil en su composición ocuparon el puesto 75 en la escala de los medicamentos más vendidos en el país, mientras que el año pasado ya habían escalado al número 22.
Alertas por este fenómeno, desde el Comité de Adolescencia de la Sociedad Argentina de Pediatría se apunta que el consumo de viagra "está creciendo entre varones de 15 ó 16 años de todas las clases sociales. Algunos chicos relatan que lo tomaron en su primera vez para garantizarse una buena performance. Si tienen sólo 5 pesos prefieren comprar viagra antes que preservativos. Antes que cuidarse, está pasarla bien".
En el 0800 de la Unidad de Toxicología del hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, en tanto, se reciben con regularidad llamadas de chicos que quieren interiorizarse por los riesgos de tomar viagra, puntualmente "qué sucede si se lo mezcla con alcohol", según cuentan especialistas de esa unidad sanitaria.
SOCIEDAD
Crece en Junín el consumo de viagra en los menores de 30 años
La venta de este medicamento se da más entre los jóvenes, que entre los de más de 50. Causas y riesgos.
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