Declararon contadores y proveedores municipales

Como estaba previsto, ayer continuó la declaración de testigos en el juicio al ex intendente Abel Miguel, la causa en  que se lo  juzga por "enriquecimiento ilícito, incumplimiento de los deberes de funcionario público y malversación de caudales públicos".
Ante el Tribunal en lo Criminal Nº 1 del Departamento Judicial Junín ayer declararon funcionarios municipales de la gestión de Miguel, como así también proveedores.
El primero en prestar testimonio fue el contador Carlos Ribé, quien prestó funciones en el Municipio durante la gestión del ex intendente hoy imputado.
A Ribé, la fiscalía a cargo del doctor Angel Quidiello y el representante del particular damnificado, doctor Manuel Gutiérrez, le preguntaron sobre el procedimiento del pago de multas y cargos al Tribunal de Cuentas y cómo eran asentados.
Ribé dijo que durante su gestión como contador municipal le fueron impuestos por parte del Tribunal de Cuentas multas y cargos, que él pagó, salvo dos que están apelados ante la Suprema Corte de Justicia Bonaerense y uno reclamado en Fiscalía.
Explicó que abonó las multas con los gastos relacionados a sus funciones y de sus cuentas personales. Ribé presentó declaración jurada de su patrimonio cuando fue contador municipal.
La defensa de Miguel, representada por el doctor Darío De Ciervo, le preguntó si alguna vez había sido procesado penalmente por dichas multas y cargos, a lo que el testigo respondió que no.
El siguiente testigo, contador Marcelo Bianchelli, también habló de las multas y cargos impuestos a él por el Tribunal de Cuentas bonaerense, y cómo había procedido. Quien fuera tesorero municipal desde 1997 al 2000 y contratado hasta el 2002, admitió haber recibido sanciones por parte del Tribunal de Cuentas, pero aseguró que fueron pagadas con su patrimonio. A la pregunta si había hecho declaración jurada ante la DGI respondió que no.
El testigo siguiente fue Aroldo Oberda, imprentero, proveedor del Municipio desde 1976. Respecto a cómo le pagaba el Municipio por sus servicios, dijo que siempre le pagaba en cheques, nunca en efectivo.

Más proveedores

Lo mismo manifestó Alejandro Guillermal, de una empresa, quien fue proveedor del Municipio durante algunos años de la gestión de Miguel. Afirmó que abonaban en cheques y a la orden.
Consultado si alguna vez había cobrado algo por un servicio que no había prestado, el testigo sostuvo que eso nunca había pasado en su relación con el Municipio.
A continuación pasó ante el estrado Salvador Cannarozzo, quien hasta hace pocos años atrás era referente del Polo Social de Junín y concejal de Junín.
A Cannarozzo le preguntaron sobre cuestiones atinentes al Comité de Crisis en los años 2001 y 2002, precisamente de las reuniones mantenidas con Abel Miguel, entonces intendente municipal, y sobre los dichos de Azil en esos encuentros.
Cannarozzo reafirmó que, ante el pedido de Azil al Ejecutivo para asignar partida al Comité, el Intendente se negó a hacerlo por "impedimentos económicos y técnicos". Según lo expuesto, no había disponibilidad de recursos en los últimos días del 2001 y primeros del 2002.
Cannarozzo manifestó que en las numerosas reuniones del Comité de Crisis participaban concejales de los distintos bloques y varias entidades representativas de las fuerzas públicas de la ciudad. Aseguró que hubo mucha predisposición de todos para ayudar ante la emergencia y que así se hizo hasta que llegaron los fondos provinciales. Señaló que todo lo ocurrido en estas reuniones generalmente era asentado en el libro de actas que llevaba a cabo la entonces concejal María Laura Tortoriello. Recordó que en aquellos días, concejales y personal jerárquico municipal donaron parte de sus dietas para ayudar en la Emergencia.