La ciudad elige, luego de una campaña que giró sobre los temas tradicionales

Poca originalidad se advirtió en la campaña que terminó el viernes a las 8 de la mañana, en la que 14 precandidatos a intendente intentaron explicar –de manera más o menos convincente– por qué quieren formar parte de oferta electoral de octubre, cuando se lleven a cabo las elecciones generales.
Las recorridas por los barrios y reuniones con vecinos fueron una constante. La idea fuerza fue la de “escuchar” al ciudadano común, la de “estar cerca”, la de acompañar e identificarse con sus problemas.
Tal vez, el camino debería haber sido otro: atender a las inquietudes de los juninenses antes del período preelectoral, de manera de ofrecer una campaña en la que se pudiera exponer iniciativas concretas para esos temas que ya habrían sido relevadas.
Sin embargo, hubo escasas propuestas para dar solución a los déficits en distintas materias.
En tal sentido, los ítems abordados fueron –en general– los mismos de siempre, los tradicionales: seguridad, tránsito, vivienda, obras públicas, relleno sanitario.
Se podrá argumentar que la reiteración de los tópicos tiene que ver con que se espera desde hace mucho una respuesta sobre los mismos.
Lo cierto es que, si tal fuera el caso, las soluciones a estos inconvenientes exigen ideas precisas, específicas, de cara a un panorama cada vez más complejo.

Un clásico
La inseguridad y el tránsito son los temas centrales para los juninenses desde hace años y es por ello que fueron los más presentes en la campaña.
Ante la problemática del delito, las ideas son, en muchos casos, comunes: más cámaras de videovigilancia, corredores de seguridad, fortalecimiento y revalorización de los foros vecinales, la articulación y el trabajo en conjunto del municipio con las fuerzas policiales, principalmente la local.
Pero también ese apuntó desde casi todas las fuerzas políticas al trabajo sobre las causales de fondo de esta problemática, que radica, principalmente, en la vulnerabilidad social. Ante esto, sobresalen las propuestas de ampliación de los programas de inclusión, de generación de empleo, y de políticas que apuntan a los jóvenes en riesgo social.
El otro tema casi omnipresente es el del tránsito. Y aquí, todos los postulantes coinciden en la necesidad impostergable de contar con un sistema de transporte público, aunque, en general, no hay detalles sobre su posible implementación, algo que no se pudo realizar en oportunidades anteriores y para lo que es imperiosa la llegada de subsidios desde el ámbito nacional.

Vivienda y obra pública
Otro punto coincidente es el de la necesidad de fortalecer las obras públicas, y allí los candidatos apuestan a que los servicios básicos lleguen a todos los barrios.
De esta manera, la prioridad pasaría por extender las redes de agua corriente y las cloacas, aunque también se puso el acento sobre otras prestaciones, como el asfalto, cordón cuneta, alumbrado público y gas natural.
En tanto, el déficit habitacional es otro asunto que se discutió en la campaña y sobre el que aparecieron propuestas que fueron, tal vez, las más concretas.
Porque más allá de los discursos que versaron sobre el “derecho a la vivienda” y la obligación de establecer políticas públicas habitacionales, hubo precandidatos que ofrecieron planes específicos que permitirían poner a la venta hasta 700 lotes por año “a precios razonables”, y otros que apuntaron a la construcción de mil viviendas en la ciudad, con un costo accesible.

Relleno sanitario
Los postulantes a la intendencia se muestran, en general, muy comprometidos “con el medio ambiente” y, en ese contexto, el relleno sanitario aparece como una prioridad, dado que consideran que es, en realidad, “un basural a cielo abierto”.
Ante esta situación, se propone “intervenir en este tema” para “buscar una solución”, aunque sin mayores especificaciones.
Es así como se postula “sanear el lugar”, o trabajar “sobre un nuevo relleno sanitario”, y apostar a la concientización ciudadana y la separación de la basura en los hogares.

Economía, producción y trabajo
En el ámbito económico, con distintos matices, se habló de apuntar al desarrollo de un proceso de industrialización, llevar a cabo políticas de crecimiento con inclusión social, y apostar al trabajo de calidad.
Aquí sobresalieron dos iniciativas por distintos motivos.
Una de ellas fue la gestión para que llegue a Junín una gran empresa automotriz china que generaría centenares de puestos de trabajo genuino, lo que podría generar un impacto de gran envergadura.
También se presentó, desde otro sector político, una iniciativa novedosa: la creación de un banco municipal de desarrollo que sea “un motor que incentive a la economía local” y permita “ser sustentable a los distintos sectores”.
La instalación de un nuevo parque industrial y el fomento a la radicación de industrias fueron otros proyectos planteados.

El aeródromo y el hospital
Entre las propuestas de las diferentes agrupaciones aparecieron dos temas puntuales que preocupan a sus representantes, que son: el estado del aeródromo local y del Hospital Interzonal General de Agudos “Dr. Abraham Piñeyro”.
Aun cuando estos dos espacios están bajo la órbita provincial, hubo numerosas referencias a la necesidad de gestionar la intervención sobre ellos.
En tal sentido, se solicitó “la recuperación del aeródromo” y la “repavimentación de la pista”.
En cuanto al hospital, se puso de manifiesto la preocupación por la falta de insumos y por la situación de los trabajadores.
Finalmente, también hubo intervenciones en pos del reclamo por la construcción de la autovía Luján-Junín en la Ruta 7.