Olivier Vandecasteele, un cooperante belga encarcelado en Irán, y Asadollah Assadi, un diplomático iraní condenado por terrorismo en Bélgica, fueron liberados ayer en un intercambio de prisioneros mediado por Omán, según la información facilitada por ambos países. Vandecasteele fue detenido el 24 de febrero de 2022 en Teherán por un presunto delito de espionaje por el que fue condenado a una pena de 40 años de prisión y a 74 latigazos.
Assadi fue declarado culpable en un tribunal de Amberes (Bélgica) en 2021 y sentenciado a 20 años de encierro por su supuesta participación en un atentado terrorista frustrado en Francia. Tanto Irán como Bélgica negaron los cargos contra sus ciudadanos, al considerarlos inventados. Alexander De Croo, primer ministro de Bélgica, afirmó este viernes que Vandecasteele ya estaba de camino a su país y que llegaría esa misma tarde.
“Anoche, Olivier voló a Omán, donde fue atendido por un equipo de soldados y diplomáticos belgas. Esta mañana ha sido sometido a varios exámenes médicos para evaluar su estado de salud y permitirle regresar en las mejores condiciones posibles”, declaró.
Por su parte, la televisión estatal iraní dio a conocer que Assadi ya se encontraba en Teherán y lo mostró sentado con funcionarios, entre ellos el portavoz de gobierno, Ali Bahadori Jahromi. Hossein Amirabdollahian, ministro de Asuntos Exteriores de Irán, agradeció al sultanato de Omán su mediación a través de su cuenta de Twitter, al decir que es “inocente” y que “estuvo detenido ilegalmente en Alemania y Bélgica durante cinco años, violando el derecho internacional”.
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