Una nueva Conferencia de las Partes (COP27) sobre el cambio climático comenzará en la ciudad balnearia de Sharm el Sheij, Egipto, con el desafío de transformar en acción y en compromisos concretos las promesas de reducción de emisiones y de financiamiento de daños y pérdidas a los países en desarrollo. La conferencia anterior, en Glasgow, Reino Unido, en 2021, no estuvo a la altura de las expectativas en ninguno de los aspectos principales.
Se esperaba un compromiso firme de los participantes para bajar a cero las emisiones de dióxido de carbono para 2050, una meta pensada para limitar el calentamiento global a entre 1,5º y 2º para fin de este siglo en relación a la era preindustrial, tal como se acordó en la icónica COP21 de París, en 2015.
Para ello era necesario reducir un 45% de las emisiones de aquí a 2030, con respecto a 2010.
COMENTARIOS