CONFLICTO

El embargo al petróleo ruso divide a la UE de cara a nuevas sanciones

Hungría y República Checa rechazaron ayer la propuesta de la Unión Europea (UE) de vetar de forma gradual las importaciones petroleras de Rusia y el bloque quedó fracturado sobre una parte central del sexto paquete de sanciones por la invasión a Ucrania, que incluye también penalizar a los mayores bancos y emisoras estatales rusas. Ese proyecto “no puede ser apoyado responsablemente en su forma actual, no podemos votar responsablemente por él”, dijo el ministro de Relaciones Exteriores húngaro, Peter Szijjarto, en un video divulgado en su cuenta de Facebook. A pesar de que el funcionario reconoció que Hungría obtendría, junto a Eslovaquia, un año y medio de transición hasta eliminar las importaciones del petróleo ruso, argumentó que se trata de “poco tiempo”.

Hungría, liderado por el premier Viktor Orban, muchas veces señalado como cercano al Kremlin, importa de Rusia el 60% del petróleo y el 85% del gas que usa. “No es una cuestión de falta de voluntad o de calendario, sino simplemente la realidad física, geográfica y de infraestructuras”, explicó el ministro. La propuesta de la UE es que los 27 países del bloque veten la importación de crudo de Rusia y penalizar a los mayores bancos y emisoras estatales rusas en un sexto paquete de sanciones por la invasión a Ucrania. “Vamos a renunciar progresivamente a las entregas rusas de petróleo en un período de seis meses y a las de productos derivados del crudo de aquí a fin de año”, dijo la presidenta de la Comisión Europea (CE), Ursula Von der Leyen.