El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció el lunes las iniciativas de su administración para regular las llamadas armas fantasmas, incluida la prohibición de la fabricación de kits que los consumidores pueden armar ellos mismos para fabricar un dispositivo que carecerá de un número de serie, lo que lo hace imposible de rastrear.
“La policía está haciendo sonar las alarmas”, dijo Biden en un evento en la Casa Blanca mientras sostenía una pistola fantasma. “Nuestras comunidades están pagando el precio”.
Los grupos de derechos a favor de las armas se comprometieron a luchar contra la regla.
“Hace un año esta semana, estando aquí con muchos de ustedes, le di instrucciones al fiscal general para que escribiera una regulación que frenaría la proliferación de armas fantasmas, porque tenía problemas para que el Congreso aprobara algo”, explicó el mandatario.
La nueva regla del Departamento de Justicia requerirá que los kits tengan números de serie que las fuerzas del orden puedan usar para rastrear las armas utilizadas en delitos, que los vendedores tengan licencia federal y que se realicen verificaciones de antecedentes de los compradores.
Cualquier tienda que obtenga un arma fantasma existente también deberá darle un número de serie.
Otra parte de la nueva regla aborda las armas fabricadas con receptores divididos para garantizar que estén cubiertas por las reglamentaciones que requieren números de serie y verificación de antecedentes. El receptor es la parte de un arma a la que se unen otras partes, como el cañón y el gatillo.
Otra sección requiere que los vendedores de armas, a los que anteriormente se les permitía destruir la mayoría de los registros después de 20 años, ahora retengan la información hasta que cierren sus negocios. Una tienda que cierra transferirá los registros a la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos, conocida como ATF.
También el lunes, Biden anunció formalmente su elección de Steve Dettelbach como director de la ATF, cargo que requiere la confirmación del Senado.
Las llamadas armas fantasmas son armas de fuego sin números de serie.
Las armas fabricadas por compañías autorizadas deben tener números de serie, que generalmente se muestran en el marco del arma y permiten a los funcionarios rastrear el arma hasta el fabricante, el vendedor de armas de fuego y el comprador.
Las armas fantasma en cambio están hechas de partes que se ensamblan. El componente crítico en la construcción de un arma imposible de rastrear es lo que se conoce como el receptor inferior. Algunos se venden en kits de bricolaje y los receptores suelen estar hechos de metal o polímero.
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