El empresario colombiano Álex Saab (48), acusado de ser testaferro del presidente venezolano, Nicolás Maduro, presentó un recurso de amparo en el Tribunal Constitucional de Cabo Verde contra su extradición a EE.UU. Y su abogado, el ex juez español Baltasar Garzón, planea una estrategia de defensa basada en la presunta inmunidad diplomática que el empresario tenía como enviado especial de Venezuela.
Saab fue detenido en junio cuando su avión hizo escala en ese país insular de África occidental, por pedido de EE.UU. cursado a través de Interpol por lavado de dinero.
El periodista venezolano Roberto Deniz, del portal armando.info, refutó el argumento de la inmunidad en una entrevista con Radio Francia Internacional (RFI) al señalar que Saab fue un “gran contratista del gobierno” de Maduro y, desde 2017, su “ministro de Economía en las sombras”. “¿Cómo puede un agente del gobierno hacer negocios millonarios que lo benefician a él mismo? Eso, incluso desde el punto de vista jurídico de Venezuela sería ilegal”, aseguró Deniz.
Saab y su socio Álvaro Pulido fueron acusados en julio de 2019 en EE.UU. de lavar dinero según un esquema de sobornos, en el cual habrían transferido 350 millones de dólares fuera de Venezuela a cuentas en el extranjero que ellos tenían o controlaban.
Uno de los primeros negocios de Saab con el chavismo, en 2012, 2013 y 2014, se vincula a la construcción de casas prefabricadas en Venezuela. Si Saab es extraditado a EE.UU., sumará más cargos en su contra: “la venta ilegal del oro venezolano, el negocio del combustible con Irán, los contratos a dedo, tráfico de influencias, y todo a través de sociedades offshore en paraísos fiscales”, agregó Deniz.
PRESENTÓ UNA DEFENSA EN CABO VERDE
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