Enviaron a prisión al ex jefe de campaña de Trump
La fiscalía argumentó que es un “peligro para la comunidad” y que cometió un crimen mientras estaba en libertad, el de obstrucción a la Justicia.
Paul Manafort, el exjefe de campaña del presidente Donald Trump, fue enviado a prisión después de declararse ayer no culpable de una nueva acusación en su contra sobre manipulación de testigos realizada por el fiscal especial que investiga la supuesta intervención de Rusia en la elección presidencial de Estados Unidos en 2016.
Manafort se presentó para la lectura de cargos ante la jueza de distrito Amy Berman Jackson en Washington, por las nuevas acusaciones presentadas por el fiscal especial Robert Mueller la semana pasada.
Jackson, después de evaluar si revocaba las actuales condiciones de fianza de Manafort, decidió enviarlo a la cárcel por los nuevos cargos en su contra.
La fiscalía argumentó en una corte federal de Washington que Paul Manafort es un “peligro para la comunidad” y que cometió un crimen mientras estaba en libertad, el de obstrucción a la Justicia.
Los fiscales aseguraron que Manafort llevó a cabo “una campaña sostenida durante cinco semanas” usando diferentes teléfonos y aplicaciones para tratar de moldear el testimonio de un testigo. Manafort, uno de los lobbistas más poderosos de Washington y muy vinculado al Partido Republicano, enfrenta siete cargos criminales en una corte federal de Washington. Además, enfrenta otros 18 cargos criminales por fraude financiero y denuncias de informes falsos en una corte federal de Virginia.