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Tensión en Italia por las elecciones legislativas del 4 de marzo.
ELECCIONES EN LA PENÍNSULA

La ultraderecha y los antifascistas llevan la política a las calles de Italia

Matteo Salvani encabezó una marcha en Milán, mientras Paolo Gentiloni, y Matteo Renzi participaron de una manifestación en Roma.

Italia acogió ayer sábado varias manifestaciones políticas, llenas de tensión en algunos casos, una semana antes de las elecciones legislativas del 4 de marzo, con una marcha de Matteo Salvani (extrema derecha) en Milán y miles de manifestantes antifascistas en Roma.
En paralelo, otros grupos de ultraderecha convocaron manifestaciones en diferentes ciudades del país, unas concentraciones salpicadas de choques entre las fuerzas de seguridad y contramanifestantes de izquierda radical.
Salvani llegó a la plaza de la catedral de Milán mientras sonaba el aria "Nessun dorma" y su épico "vincerò" (ganaré) final, con su hija de cinco años en brazos, para luego subir a un podio para explicar su programa.
Aliado con los conservadores de Silvio Berlusconi para las legislativas, el dirigente de La Liga aspira a quedar primero dentro de esta coalición, que encabeza los sondeos, y así convertirse en jefe de gobierno.
"Los italianos primero", recalcó, atacando primero a la inmigración y a Matteo Renzi, jefe de filas de centro-izquierda para las elecciones, muy abucheado por la multitud (entre 15.000 y 20.000 personas según la policía, 50.000 según La Liga), que enarbolaba las banderas del partido, de Venecia e incluso de Cerdeña.
Salvani prometió ocuparse prioritariamente "de las personas mayores obligadas a rebuscar entre las cajas tiradas por los supermercados", de los obreros víctimas de la deslocalización y de los pequeños comerciantes.
Mientras tanto, en Roma, miles de personas desfilaron en calma para denunciar al fascismo, en una concentración convocada después de que un militante de la Liga disparara contra un grupo de africanos en Macerata (centro), en represalia por un sórdido asesinato imputado a unos nigerianos.
"Estamos aquí para decirle no al fascismo, porque hay demasiados episodios nocivos en este momento, esto no debe volver a ocurrir", declaró Rita Solo, de 50 años, afiliada al sindicato CGIL y procedente de Cerdeña.
"Los partidos nacionalistas hacen que resurjan los valores fascistas, vuelve el miedo al diferente. Nosotros, los jóvenes, no podemos ceder a este miedo, si no daremos un salto de 100 años atrás", añadió Marta Zambon, educadora milanesa de 27 años.
El jefe de gobierno, Paolo Gentiloni, y Matteo Renzi participaron brevemente en la manifestación, que se desarrolló sin incidentes.

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