Poner a punto el auto para salir de viaje ya cuesta más de 100 mil pesos en Junín
VACACIONES DE VERANO

Poner a punto el auto para salir de viaje ya cuesta más de 100 mil pesos en Junín

El precio incluye el cambio de aceite, filtros y pastillas de freno; el refrigerante, la alineación y balanceo; y la VTV para un vehículo de media gama. Pero puede incrementarse si se requieren otras mejoras, como sustituir los neumáticos, batería, amortiguadores o hacer tren delantero.

De cara al último mes del año, llega la época de planificar las vacaciones. Para quienes tengan pensado viajar en sus propios vehículos es importante saber que en los talleres mecánicos comenzó ya la temporada alta, que va desde noviembre hasta marzo.

Si bien la palabra final dependerá de cada caso en particular e incidirá el tipo y modelo de vehículo, así como también la complejidad y profundidad de los trabajos a realizar, para poner el auto a punto con la idea de viajar por las rutas cuesta por estos días más de 100 mil pesos. 

Cada auto es un mundo y, por más que sean el mismo modelo, del mismo año, con el mismo motor y comprado en la misma concesionaria, son muy pocas las chances de que un vehículo necesite exactamente las mismas reparaciones que otro. Hecha esta salvedad, es posible hablar de ciertas reparaciones que son más comunes y que suelen repetirse como patrón. 

La inspección técnica, que arranca en $6.000 (si se tiene la suerte de no tener que reparar nada), garantiza una travesía segura y permite detectar fallas que pueden ser perjudiciales.

Los chequeos deben hacerse periódicamente, pero naturalmente llega fin de año y muchos se dan cuenta de que los dejaron para último momento. Lo más básico, como es el cambio de aceite, filtro y refrigerante; alineación y balanceo, cambio de pastillas de freno y la Verificación Técnica Vehicular (VTV) –obligatoria y que certifica que el coche esté en condiciones–, cuesta más de 100 mil pesos para un vehículo de gama media, dependiendo del modelo del auto, los repuestos y el taller.

“Para salir a la ruta, siempre lo que aconsejamos es el service, el aceite y filtros, revisar bien los frenos, el tren delantero y las luces. Eso se hace siempre, y nosotros cada vez que hacemos el service, hacemos toda esa revisión. Y un consejo que se le da al cliente es que tenga en cuenta cuándo corresponde cambiar la correa de distribución, dependiendo cuántos kilómetros tenga de la última vez que fue cambiada, cuántos años, eso es importantísimo”, afirmó a Democracia el mecánico juninense Martín Zinani. 

El cambio de correa de distribución, con mano de obra y repuestos, puede llegar a costar unos 130 mil pesos para un auto estándar.

“Mucha gente cree que solamente la correa de distribución se cambia cada cierta cantidad de kilómetros, pero no es así: se cambia cada cierta cantidad de kilómetros o cierta cantidad de años. Hay autos que cada 5 años, y por más que no haya cumplido los kilómetros, se la tienen que cambiar”, informó. 

En la actualidad, el servicio de alineación y balanceo ronda los $8.000, con altibajos según el lugar. Cambiar las pastillas de freno tiene un valor de al menos $16.000, aunque varía según el modelo del vehículo, la tecnología del sistema de frenos y el eje a cambiar (delantero o trasero).

“Si hay que regular los frenos traseros -una de las fallas que más saltan en la VTV- hay que pensar en invertir a partir de 4000 pesos. Y hacer todo el trabajo de frenos completo en un vehículo liviano (auto), que incluye rectificar las campanas, cambiar cintas y el líquido, ya estamos hablando de 40 mil pesos”, explicaron desde otro taller mecánico.

Por otra parte, para cambiar el aceite (semi sintético) y los filtros se debe erogar más de $45.000, incluidos los repuestos. Además, renovar el agua destilada y el líquido refrigerante puede llegar a costar 8 mil pesos.

Además, se debe sumar la VTV, que es indispensable para circular en la ruta, y tiene un costo de $9.870,35, cuando el año pasado tenía un valor de $3.150. En Junín se tramita en el predio situado en el Parque Industrial sobre avenida Alvear y Circunvalación y el vencimiento, por una nueva disposición, es por el número de la patente. 

Continuando con los gastos necesarios para poner el auto a punto para viajar, es recomendable hacer todos los años una revisión mecánica general y un chequeo de alternador y burro de arranque. 

Hay talleres que hacen las revisiones de forma gratuita, pero de ser necesaria una reparación de alternador y burro se deben gastar unos $27.000, según lo presupuestado por los talleres mecánicos.

Finalmente, vale mencionar el costo de un kit de seguridad para el auto (balizas, botiquín de primeros auxilios y matafuegos). Es obligatorio y su valor alcanza los $11.000. 

De todos modos, el impacto de estos gastos de service y mantenimiento puede bajar si los cambios se hacen paulatinamente antes de salir a la ruta.

Mantenimiento y seguridad

Los servicios mencionados anteriormente deben realizarse cada una cantidad determinada de kilómetros que varían según la marca, el modelo y el uso que se le dé al vehículo.

Sin embargo, la mayoría de los mecánicos coinciden en que ninguno de ellos debe faltar antes de un viaje largo.

Diferente es el caso de otros repuestos y servicios que resultan indispensables para el mantenimiento del auto y la seguridad en la ruta, pero no deben hacerse necesariamente todos los años.

Un ejemplo son los neumáticos. Los expertos recomiendan cambiarlos cada 40 mil kilómetros, pero con un mantenimiento adecuado pueden durar más tiempo. De todas formas, el tener cubiertas en condiciones es, junto con los frenos, lo más importante en materia de seguridad. Para cambiar las cuatro ruedas, se deben gastar $300 mil si se respetan las medidas originales de los autos de media gama (por ejemplo, rodado 14).

“Lo primordial para cualquier persona que vaya a salir de viaje es revisar los neumáticos. Porque partimos de la base de que hay que completar un tramo largo y es un elemento fundamental en la seguridad”, advirtieron.

En ese sentido, de mano de obra se pueden gastar $20.000 para un tren delantero completo y algún repuesto, y se pueden desembolsar hasta $75.000 si hay que cambiar amortiguadores. Y una vez que se revisa eso, también hay que aprovechar para ver si hay algún otro desperfecto, como puede ocurrir -por ejemplo- en los bujes.

Otro gasto que no aparece todos los años, pero es inevitable, es la compra de una batería. Hoy las más económicas (poca duración) cuestan hasta $35.000.

En cuanto a otra de las fallas más comunes que se detectan en la VTV, y que suelen obligar a los conductores a regresar una vez más en búsqueda de la ansiada oblea: las lámparas de luces (ya sean de stop o delanteras). Rondan los 2000 pesos y, si se compra en un mismo taller y como parte de un service integral, no se cobra la colocación. 

En un hipotético caso de que los principales detalles de un auto estén en muy mal estado, un service completo e integral rondaría los 350.000 pesos. Sin embargo, y como resaltan los especialistas destacados, es “muy difícil” que haya que hacerle todo junto al vehículo. Y, a modo de promedio, destacan que -más allá de las particularidades de cada caso- hay que pensar en una inversión de 100.000 para salir tranquilos y con el auto en condiciones.

“Todo el mundo está buscando precios”

Según dijo Zinani, este año en el taller “hemos prestado atención a que los trabajos que antes hacíamos normalmente sin ningún problema, hoy ya a mucha gente le cuesta hacerlo y todo el mundo está buscando precios que antes en el auto no se veía. Generalmente todo el mundo decía: ‘poneme lo mejor, no quiero renegar’, pero hoy hay gente que ya empieza a buscar precios, por más que tenga que bajar la calidad del producto para poder repararlo y no dejar el auto parado”.

Hace años atrás “eso no pasaba nunca, todo el mundo insistía en que pongamos lo mejor posible para no renegar, y ya hoy no. Muchos no reparan el auto porque el presupuesto hoy es altísimo o muchos deciden buscar mercadería repuesto de menor calidad para bajar el costo y poder arreglar el auto”, confirmó. 

En esta época del año de cara al verano, y al igual que en vacaciones de invierno, “aumenta un montón la cantidad de service. Durante todo el año uno tiene trabajo variado, que son los service o los demás trabajos que hacemos en el taller. Pero desde ahora hasta febrero se nota mucho la diferencia que hacemos por día un montón más de service. Todo el mundo quiere preparar el auto para poder salir a la ruta e ir de vacaciones”. subrayó.

Otros costos

El constante aumento de precio de los combustibles durante el año pasado, sumado a la suba de 2023, le agregó un plus al bolsillo para quienes se mueven en auto y además incide directamente a la hora de vacacionar.

Llenar un tanque de nafta de unos 40 litros representa un gasto de unos $13.100 (a 329 pesos el litro de súper en una YPF de Junín). Si en el mes se gastan dos tanques -es el promedio para alguien que usa el auto particular para ir al trabajo, hacer compras, llevar a los chicos a la escuela y otras actividades recreativas-, entonces el costo cada 30 días ascenderá a más de $26.200.

En el cálculo mensual también se deben tener en cuenta los valores de las cocheras –si se requiere–, estacionamiento medido, seguros, peaje, lavado, impuestos y visitas al taller.

La suba anual en la valuación de los vehículos elevó los impuestos que pesan sobre las unidades. Tanto el cálculo de la patente, que en la provincia se abona en cinco cuotas anuales, como el costo del seguro tienen en cuenta el valor del vehículo.

La cuota de la patente automotor de un rodado 2013 ronda los $4500, lo que multiplicado por cinco da $22.500 por año; mientras que un seguro contra terceros completo ronda los $16.000 por mes.

Repuestos por Mercado Libre

Continuando con la entrevista, Zinani señaló: “Otro punto a tener en cuenta, que hemos visto en los últimos años en el taller, es que siempre los repuestos los compraba el mecánico o los compraba el cliente acá en Junín en las casas de repuesto. Pero hoy te digo que más de la mitad, casi un 70% de la gente que viene al taller, ya viene con el repuesto comprado por comercio electrónico”.

“Entonces nos está pasando estos últimos años que, cada vez que traen un auto a reparar o hasta a hacer un service, la gente nos dice: 'mirá, tengo los repuestos en el baúl y está todo en la caja de Mercado Libre'. Es mucho lo que se compra.”

“Hace un par de años atrás comprar un repuesto por internet por ahí equivalía a tener el auto una semana parado hasta que llegue el repuesto. Hoy ya se ha agilizado todo eso: vos desarmás un auto y pedís un repuesto de Mercado Libre por envío full y al otro día lo tenés en el taller. Así que eso es algo que en este último tiempo se ha notado un montón.”

Seguros por las nubes

Desde hace meses las aseguradoras de vehículos también están mostrando modificaciones en los costos de las pólizas. Se modificó la refacturación de las pólizas, que pasó de seis a cuatro meses y hasta en algunos casos ya son trimestrales, dependiendo de la compañía, como una medida de atenuar el impacto de la inflación en las empresas. 

A eso se suma el incremento sostenido de los valores de los vehículos, que al momento de pasarlo a la suma asegurada, sin dudas, impacta en el monto a pagar por parte del asegurado. 

Lo más reciente es la baja de una de las coberturas premium tal como eran y su reconversión que, sin dudas, le pega de lleno al bolsillo del asegurado. Los aumentos de las pólizas tienen ahora un complemento para quienes contratan seguros con franquicias. Desde hace un tiempo, las compañías discontinuaron las coberturas con franquicias fijas y las reemplazaron por un esquema variable. 

Si hasta ahora el cliente contaba con un seguro con franquicia de 90 mil pesos y debe renovar la póliza, esa cobertura ya no se comercializa más y en su reemplazo las aseguradoras ofrecen franquicias variables según porcentajes de la suma asegurada. Esto, sin dudas, significa un fuerte incremento para el asegurado si su intención es mantener un producto similar. 

Además, las empresas le agregan un tope mínimo, lo que a su vez repercute en lo que el cliente debería pagar en caso de tener un siniestro y contar con estas franquicias variables. Según pudo averiguar este diario, este esquema ha sido implementado de manera paulatina por las distintas compañías para casi todos los modelos. Un ejemplo puede clarificarlo mejor: tomamos como referencia un vehículo Chevrolet del año 2013, valuado en 4.200.000 pesos y que contaba con una cobertura contra todo riesgo con una franquicia de 90 mil pesos. 

Eso significaba que cualquier arreglo por debajo de ese monto debía pagarlo el cliente y, de haber un excedente, pasaba a ser cubierto por la compañía. 

En cuanto al tope mínimo, si el cliente tiene una franquicia variable del 1 por ciento y el monto asegurado del vehículo es de 10 millones de pesos, el 1 por ciento sería 100 mil pesos, pero, como el tope mínimo es de 190 mil pesos, este último será el que operará como franquicia en caso de un siniestro y no los 100 mil pesos.

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