Respuesta sobre el Aeródromo

El 21 de febrero del corriente participé de una reunión en Junín vinculada al tema del transporte público en el distrito, en calidad de presidente de la Comisión de Transporte de la Cámara de Diputados de la Provincia. En esa oportunidad, el periodismo que asistió al evento me puso en conocimiento del tema de la clausura -desde hacía dos años- del aeródromo de Junín, lo que motivó a que me dirija personalmente al lugar. Allí pude apreciar que todos los campos adyacentes al aeródromo estaban cultivados con soja.
Confío en que uniremos esfuerzos con la diputada Valeria Arata y su bloque para que el aeródromo de Junín vuelva a estar operativo a la brevedad. Desde ya puede contar con el apoyo del Bloque del FAP para aprobar sobre Tablas su proyecto de declaración en la próxima sesión de la Cámara de Diputados bonaerense.
Existe la posibilidad de realizar una obra de mejora de la superficie de la pista 18/36 con mezcla asfáltica en caliente cuyo costo ronda los $ 2.000.000 que permitiría volver operativa para aeronaves de peso menor a 5.700 kilogramos. Esto haría posible operar la flota aérea provincial para realizar evacuaciones sanitarias y vuelos del C.U.C.A.I.B.A. ya que los aviones con los que cuenta la provincia se encuentran por debajo del peso mencionado pudiendo aterrizar y despegar perfectamente y con seguridad.
La licitación de la obra de “Recapado y puesta en norma de la pista 18/36 del Aeródromo de Junín” tenía un presupuesto oficial de $ 4.758.380 aunque fue adjudicada a una empresa por un costo de $ 5.649.000. La obra se licitó a fines del año 2011 debiendo iniciarse los trabajos a principios del año 2012 pero esto jamás ocurrió y la pista sigue inhabilitada.
Teniendo en cuenta que la pista podría estar operativa con una obra de un costo de $ 2.000.000, creemos que este monto puede tomarse, más no sea parcialmente, de los recursos obtenidos por el cultivo de las 120 hectáreas de soja en cumplimiento a lo dispuesto por el Decreto 2199/77, el cual obliga al Municipio de Junín a invertir lo recaudado por la explotación comercial de las áreas libres del Aeródromo en el mantenimiento del mismo.