None
RECORRIENDO LOS BARRIOS

Nuestra Señora de la Merced: “El sector tiene necesidades y hacen falta obras”

Trabajan por conseguir la extensión de las redes de agua corriente, cloacas y gas natural. También solicitan más luminarias, mantenimiento de lotes y más patrullajes. Reclaman por los graves problemas de tránsito.

Limitado por las calles Ramón Hernández, Soldado Argentino y su continuación, Miguel Lonegro, Mariano Moreno y la Ruta Nacional Nº 7, el barrio Nuestra Señora de la Merced adquirió en el último tiempo un gran desarrollo urbanístico, comercial e industrial.
A partir de la saturación que se da en la zona más céntrica de la ciudad, los sectores periféricos, como éste, fueron recibiendo nuevos moradores, atraídos por la tranquilidad que hay en zonas alejadas. En ese marco, La Merced cuenta actualmente con más de 200 familias residiendo en el lugar, una importante extensión comercial y hasta la instalación de industrias.
Sin embargo, los lugareños destacan que todavía falta mucho por hacer en materia de infraestructura.

Infraestructura

De acuerdo al cálculo de las autoridades fomentistas, entre las 80 manzanas de este barrio, alrededor del 40% cuenta con agua corriente, un 20% tiene cloacas y otro tanto está conectado a la red de gas natural.
En tal sentido, el presidente de la sociedad de fomento, Jorge Mendoza, aseguró que “este sector tiene muchas necesidades y hacen falta obras”.
No obstante, los referentes barriales confían en poder sumar más prestaciones.
Mendoza explicó que mantuvieron reuniones con representantes de Obras Sanitarias y, según su apreciación, hubo “una respuesta favorable, ya que tenían pensadas obras para este sector”, y puntualiza: “Se va a crear un barrio correspondiente a Amcipa y eso va a favorecer a los vecinos de esa zona. Nos dijeron que en diciembre se iban a hacer unas cuadras de la red de agua sobre la calle Mayor López, desde Lonegro hasta Tassara, y todo el sector del barrio Amcipa sería para febrero o marzo y, desde ahí, se va a ramificar por algunos sectores aledaños que van a ser beneficiados con los servicios de agua y cloacas”.
Asimismo, también fueron recibidos por funcionarios del Grupo Servicios Junín, para tratar de conseguir más beneficios en cuanto al gas natural. “En febrero o marzo vamos a empezar a charlar para ver si se puede extender más la red en esta zona”, señalan.
En tanto, el dirigente barrial también hace referencia a las necesidades de mejorar el alumbrado público: “Si bien está mejor que un tiempo atrás, falta seguir trabajando en este sentido. Tuvimos reuniones y tenemos presupuestos de artefactos, porque la idea es juntarnos entre vecinos para ir comprando las luminarias, de manera que después el municipio las coloque. Pero, hay algunos sectores en los que no hay postes ni cableado, lo que dificulta hacer esta tarea”.

Las calles y el tránsito

A excepción de Benito de Miguel y Soldado Argentino, todas las calles del barrio son de tierra y no tienen cordón cuneta ni base estabilizada.
Es por ello que con las lluvias se producen grandes anegamientos en muchas zonas, como la calle Ramón Hernández, la esquina de Francia y Ferreyra, o la intersección de Francia y Fulgenzi.
Además, al ser un barrio en donde hay muchos depósitos y algunas fábricas, suelen circular muchos camiones, “lo que hace que las calles no duren mucho”.
Con todo, remarcan que “el del regador es un servicio que funciona bastante bien, es equilibrado y repartido”.
Asimismo, la circulación vehicular es uno de los principales inconvenientes de este sector.
Por un lado, están los problemas que trae el cruce de la avenida Benito de Miguel con la Ruta 7, que conlleva un gran peligro para quienes deben ir al centro de la ciudad, o vuelven de allí.
Pero también está el caudal de tráfico sobre Benito de Miguel, como especifica Mendoza: “No hay nada que haga aminorar la marcha de los vehículos. No sé si la solución sería que haya semáforos, pero algo hay que hacer porque tenemos muchos problemas en esa avenida. Y además, es una zona  muy transitada por camiones”.
Asimismo, la señalización de las calles interiores del barrio es otro tema que provoca dificultades, sobre todo a la hora de llamar ambulancias o taxis.

Inseguridad

Por otra parte, está la cuestión de la inseguridad, que es algo que preocupa mucho a los vecinos del lugar.
“No hay mucha seguridad, los móviles de la Policía pasan, pero muy poco”, sostienen los fomentistas.
No obstante, los dirigentes barriales aseveran que esta problemática va más allá de los patrullajes, como profundiza Mendoza: “Hay algunos robos. Pero el hecho de tener lotes descuidados, sin mantenimiento, también incide en la inseguridad. Lo mismo que la falta de luminarias. Por otro lado, la policía mucho no pasa, a veces lo hace por Benito de Miguel, pero no en las calles interiores del barrio”.

La sociedad de fomento


Jorge Mendoza asumió como nuevo presidente de la sociedad de fomento hace menos de un mes.
Según dice, su gestión se basará en tener actividades y servicios para los vecinos: “Hoy tenemos un taller gratuito de tango para todas las edades, que empezó la semana pasada; también hay clases salsa; tenemos una escuelita de fútbol que depende del Club Defensa y sirve para contener a los chicos del barrio; y además funciona un plan de terminalidad Fines para adultos que no terminaron su escolaridad”.
El flamante titular de la entidad barrial agrega que trabajarán en la recuperación de socios y su próximo objetivo será el de mejorar los baños del amplio salón, que se alquila para eventos.

COMENTARIOS
En sus palabras