El presidente de la sociedad de fomento, Jorge Adí Prieto, se queja por la falta de respuestas del municipio: “El intendente no nos recibe. Antes de las elecciones nos prometió que iba a ser una gestión de puertas abiertas con los fomentistas, pero ahora nos manda a hablar con Cristina Cavallo, y ella junta todas las inquietudes y se las pasa al secretario de Gobierno, y yo no conozco ningún resultado”.
Según dice, “aumentó la burocracia y no hay forma de solucionar las cosas”.
Con todo, la comisión vecinal sigue trabajando en su principal objetivo, que es la construcción de una sede, en los dos lotes que son propiedad de la entidad.
“Es algo muy costoso –explica Adó Prieto–, hicimos un convenio con la Unidad 49, nosotros proporcionamos los materiales y ellos nos fabrican los bloques de cemento. El problema es que hay que pagar la mano de obra y eso cuesta mucho dinero”.
COMENTARIOS