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SE REALIZÓ UNA REUNIÓN CON LAS AUTORIDADES POLICIALES

Almirante Brown: Fuerte reclamo por la inseguridad

Afirman que un grupo de jóvenes mantiene en vilo a todos los vecinos, generando hechos de violencia y vandalismo. Piden más presencia de las fuerzas de seguridad. “No queremos que haya una violación o una muerte, por eso queremos prevenir”, advierten.

Los vecinos del barrio Almirante Brown realizaron un fuerte reclamo a las autoridades policiales por la inseguridad.
Es que en este sector, un grupo de jóvenes mantiene en vilo a todos los lugareños.
De acuerdo al relato de los residentes, entre 15 y 20 muchachos (la mayoría sería menor de edad) se juntan en un predio lindero a la sede fomentista y generan hechos de violencia y vandalismo.
Por tal motivo, se realizó una reunión en la sede fomentista, a la que concurrieron las autoridades policiales, entre otras: el titular de la Comisaría Segunda, subcomisario Alejandro Zagardoy; el jefe del Comando de Prevención Comunitaria (CPC), comisario inspector Horacio Ferrari; y el coordinador de las fuerzas policiales en la ciudad, comisario inspector Miguel Ángel Zabala.

Las denuncias
La lista de denuncias de los vecinos es extensa e incluye situaciones de diversa gravedad, desde disparos con armas de fuego hasta hechos de vandalismo.
Según dicen, el lunes pasado se escuchó un tiroteo y algo similar ya había ocurrido el martes de la semana anterior.
En su relato, los lugareños enumeraron las agresiones sufridas: “En la sociedad de fomento rompieron los vidrios y el aire acondicionado, también las luces que iluminan el lote que está al lado, cascotean casas, piden plata, amenazan, piden medicamentos por la fuerza en la posta sanitaria, las maestras de jardín maternal no pueden sacar a los chicos a jugar, antes se ponían inflables para hacer los cumpleaños y ahora eso no se puede hacer más, les gritan cosas a las chicas, se drogan en ese lugar”.
Vecinos indignados
Unos 35 residentes del barrio Almirante Brown se dieron cita en la sede fomentista el martes pasado a las 20, para plantear sus padecimientos a las autoridades policiales.
Los vecinos aseguran que viven “con miedo” por el comportamiento de una barra de jóvenes que se juntan en el predio ubicado en la esquina de Bozzetti y Almirante Brown.
“Son chicos que vimos nacer, se criaron entre nosotros y hoy nos tienen en jaque”, explicaba uno de los lugareños.
Enseguida, otro agregó: “Tenemos que convivir con esto durante todo el día, hay bebida, sexo, droga, orinan en las veredas, las maestras del jardín maternal no pueden sacar a los chicos a jugar, acá (en la sede fomentista) se da el curso de educación vial para obtener el carnet de conductor, y se han robado carburadores de motos de las personas que venían”.
Indignados, varios coincidían en que no se les puede decir nada porque después sufren amenazas y represalias: a varios les “cascotearon” la casa por haberles pedido que mejoren su comportamiento.
Inclusive, afirman que se hicieron denuncias a la policía, pero luego “ellos se enteran de quiénes los denunciaron”, y ahí vienen las represalias.
“Estoy podrido de no poder salir a la puerta de mi casa”, se exaltaba uno de los vecinos.
Enseguida, otro ratificaba la misma situación: “Mis hijas no pueden estar en la calle, no las puedo mandar a comprar pan”.
Los vecinos solicitaron la acción inmediata de las fuerzas de seguridad: “No queremos que haya una violación o una muerte, por eso queremos prevenir”.
También hubo críticas al accionar policial. “El patrullero pasa, los chicos les gritan, y no hacen nada”, dijo una vecina. Y otro añadió: “Nosotros llamamos, vienen, pero cuando el móvil se va, vuelven los problemas”.
Es que, según dicen, los patrullajes son muy esporádicos: “Hay ciudadanos de primera y de segunda. Todo Junín está lleno de policías, acá pasa un móvil por día. En Rivadavia los patrulleros se chocan entre sí ¿somos ciudadanos de quinta? Necesitamos una política de prevención”.

Las explicaciones
En el encuentro, el comisario inspector Zabala sostuvo que “este no es un tema solo de la policía”, y profundizó: “Entendemos la situación, nosotros también vivimos en un barrio. Lo que les pedimos es que llamen al 911, la policía necesita el apoyo del vecino porque en estos casos, cuando se judicializan, después se necesitan testigos”.
Ante las quejas por la “ausencia del patrullero”, los referentes policiales explicaron que el móvil de este sector debe cubrir un área muy amplia (la zona ocho) cuyos límites son las rutas 7 y 188, la calle Alberdi y la avenida de la Sota.
“Esto también pasa en otros barrios”, admitieron las autoridades.
Por su parte, el subcomisario Zagardoy sostuvo que “las puertas de la Comisaría Segunda están abiertas, y al momento de hacer una denuncia no se les va a pedir nombre ni apellido”.
Los representantes de las fuerzas de seguridad desalentaron a los presentes a que se tomen acciones por mano propia y se comprometieron a incrementar los patrullajes.

Conclusiones

Julio Míguenz, histórico vecino de este barrio y uno de los promotores de la reunión, señaló a Democracia que están “muy preocupados” por la situación, y advirtió que en Almirante Brown “hay un grupo minoritario que nos está disciplinando con el miedo”, por lo que solicitó que se le ponga “límites”.
No obstante, aseveró que se fue de la reunión “con esperanzas de que va a salir algo bueno, que las autoridades policiales van a actuar” y convocó a los vecinos “para que se sumen a este reclamo”.
Por su parte, el comisario inspector Ferrari expresó: “Escuchamos las demandas de los vecinos que son ciertas y valederas. Lamentablemente no es exclusivo de este barrio. Vamos a asumir la responsabilidad y el compromiso de intensificar los patrullajes, de poner más gente y más móviles para solucionar los problemas. Necesitamos que la gente llame, denuncie, y que cada uno de nosotros cumplamos con el rol que nos corresponde para poder vivir en sociedad, como nos merecemos todos”.

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