Península Valdés: entre los 10 mejores lugares del mundo para ver ballenas

Península Valdés es Patrimonio de la Humanidad por muchas cosas, pero especialmente porque es el lugar que eligen las ballenas para reproducirse y tener a sus crías cada año. No por nada, la ballena franca austral fue declarada Monumento Natural Nacional en 1984. Y qué monumento: Éste mamífero puede medir hasta 15 metros de largo y pesa un promedio de 40 toneladas.
En Puerto Pirámides, el único pueblo dentro de la reserva natural Península Valdés, se ofrecen avistajes embarcados en lanchas, catamaranes y hasta en un semisumergible.
A partir del mes de junio y hasta diciembre, estas gigantes llegan a las costas del Golfo Nuevo, y con ellas, muchísimos turistas provenientes de todo el mundo. En Puerto Pirámides, el único pueblo dentro de la reserva natural Península Valdés, se ofrecen avistajes embarcados en lanchas, catamaranes y hasta en un semisumergible, el Yellow Submarine, una de las últimas propuestas turísticas que surgió en relación a las ballenas.
Otra buena opción para verlas bien de cerca es en las playas de El Doradillo, a 15 kilómetros de la ciudad de Puerto Madryn, con aguas muy profundas a pocos metros de la orilla. Ahí se las puede acompañar de una punta a la otra de la playa, mientras ellas les enseñan a nadar a sus crías. El ingreso a este área natural es gratuito.
Según publicó la revista National Geographic, Península Valdés está entre los 10 mejores lugares de todo el mundo para ver ballenas. En la lista también se incluye: Hermanus (Sudáfrica), Alaska (Estados Unidos), Hervey Bay (Australia), Islas Azores (Portugal), Praia do Rosa (Brasil), Bahía Ballena (Costa Rica), California (Estados Unidos), Mar de Cortez (México), e Islas Canarias (España).
Por esta misma razón es que la ciudad de Puerto Madryn, puerta principal a Península Valdés, este año fue sede del “Día mundial contra la caza de ballenas”.
Los encuentros se realizaron a fines de julio y convocaron a representantes de la Comisión Ballenera Internacional, además de funcionarios, operadores, ONG y científicos.
Las exposiciones se realizaron en el Centro Nacional Patagónico (Cenpat-Conicet), y se debatió sobre el uso no letal de los cetáceos y la situación de los países cazadores furtivos.