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UNA REALIDAD PREOCUPANTE

Solo en el país, se calcula que la muerte súbita se cobra cuatro víctimas por hora

Es una proyección de médicos cardiólogos. Se llama así a una abrupta falla del corazón. Los fallecimientos por esta afección duplican a los decesos por Sida, cáncer de mama y de pulmón

Solo en nuestro país, se calcula que la muerte súbita es responsable de cuatro víctimas por hora, y que muchas veces afecta a personas que tienen corazones estructuralmente normales o sin problemas visibles, pero que sí padecen trastornos eléctricos primarios.
Las cifras, que a primer golpe de vista parecieran excesivas, se ajustan sin embargo a una realidad preocupante.
“Las cifras oficiales -explica el médico Ricardo López Santi, cardiólogo del Hospital Italiano de la capital provincial y ex titular de la Federación Cardiológica Argentina- es decir aquellas constatadas por certificados de defunción y corroboradas por el Ministerio de Salud de la Nación, hablan de 100 mil muertes por año por problemas cardíacos, con una injerencia de 250 casos cada 100 mil habitantes. La muerte súbita es un subtipo de la enfermedad cardíaca, de la que el infarto es la principal causa, y, efectivamente, afecta a un gran número de personas”.
Cabe destacar que la muerte súbita es el deceso de una persona de manera inesperada, independientemente de su edad y en ausencia de signos o síntomas de algún problema médico.
Sin embargo, los cardiólogos advierten que, según estadísticas internacionales, la mitad de los pacientes tuvo “avisos” antes de morir, como desmayos frecuentes, palpitaciones o dolores de pecho.
“Si tenemos en cuenta que la mitad de los pacientes que presenta muerte súbita tuvo síntomas premonitorios -señaló por su parte el cardiólogo infantil José Moltedo- eso quiere decir que el cuerpo en cierta forma dio avisos. Sin embargo, eso no ocurre en la mayoría de los casos sino fundamentalmente durante la práctica de deporte, cuando es más común que aparezcan desmayos, palpitaciones o dolores en el pecho”.

En jóvenes y en adultos
Moltedo, también coordinador de Electrofisiología Pediátrica de la Clínica y Maternidad Suizo Argentina, enfatizó que “esos signos de alerta, aparezcan cuando se está haciendo ejercicio o no, son suficientes para realizar una consulta inmediata con el especialista, si se tiene en cuenta que en nuestro país ocurren 4 casos de muerte súbita por hora”.
En el mundo, mueren 17 millones de personas por año a causa de afecciones cardiovasculares, y el 10 por ciento corresponde a muerte súbita, casos que suelen duplicar a los decesos por Sida, cáncer de mama y de pulmón.
“Si bien los episodios de muerte súbita son mucho más frecuentes en adultos -señala el doctor Moltedo- en los últimos años hubo varios casos en deportistas jóvenes que tuvieron mucha repercusión. En cambio, la incidencia de muerte súbita en niños oscila entre uno y seis chicos por cada 100.000 al año, y la mayoría de las veces se da entre el nacimiento y los 18 años”.
“La causa de muerte súbita más frecuente en niños -agregó- son los problemas cardíacos, que pueden ser catalogados en distintos tipos, como, por ejemplo, un engrosamiento anormal del músculo cardíaco que se llama miocardiopatía hipertrófica y conlleva riesgo variable”.
Los especialistas hacen hincapié asimismo en que muchas veces la muerte repentina se da en personas con corazones estructuralmente normales que no tienen problemas musculares ni vasculares visibles ni nada microscópicamente visible, pero que sí tienen trastornos eléctricos primarios.
“Lo que lleva a la muerte -explicó Moltedo- es una arritmia muy rápida de los ventrículos que se llama fibrilación ventricular, causada por defectos en los impulsos eléctricos, y que genera la muerte independientemente de la causa subyacente. Otra de las patologías que puede generar muerte súbita son las cardiopatías congénitas”.
Es por esto que siempre se advierte que antes de realizar deportes de alto rendimiento, hay que hacerse un chequeo médico completo. Sin embargo, no siempre alcanza.
“Algunos creen que la realización de un ecocardiograma y un electrocardiograma son un cheque en blanco para que no les suceda nada malo, pero los métodos de screening tienen limitaciones, por lo que la muerte súbita puede ocurrir aunque esos estudios hayan dado bien”, remarcó Moltedo.

Prevenciones
Frente a la gravedad de esta patología, los médicos insisten en la atención primaria urgente cuando el hecho ocurre fuera de una institución médica, donde son los eventuales testigos quienes deben llamar de inmediato al sistema de emergencias y tratar de mantener al paciente con vida mediante las técnicas de RCP, cualquiera sea la edad del afectado, aunque la incidencia de la muerte súbita es por lo general mayor en pacientes de hasta 35 años, porque luego de esa edad las patologías están más relacionadas con problemas cardíacos que empeoran con el paso de los años.

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