El campo de Junín advierte que el revalúo inmobiliario será perjudicial para el sector

Frente a la inquietud que genera en los dirigentes del campo bonaerense los cambios impositivos que proyecta el gobierno de María Eugenia Vidal para el sector a través del revalúo sobre el impuesto a las mejoras rurales, el titular de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), Matías de Velazco, salió a pedir que “no les corten las piernas” con los aumentos.
“Solo le pedimos a los funcionarios provinciales que no nos corten las piernas cuando fijen el revalúo inmobiliario”, dijo De Velazco al hablar en la Rural de Saavedra. Además, señaló que “el campo está endeudado, no tiene capital de trabajo y sigue sufriendo una fuerte presión impositiva”.
En esa misma línea, Rodrigo Esponda, representante de la Sociedad Rural de Junín en el consejo directivo de Carbap, consideró que “no deberían hacerse más modificaciones impositivas independientemente de mirar el paquete general”.
“Lo que nosotros no queremos es que ni la Nación, ni la Provincia ni el Municipio analicen un impuesto y en base a eso saquen conclusiones, lo que queremos es que haya un análisis general de la carga y ahí todos van a poder ver que es imposible seguir aumentando los impuestos. Si nosotros nos fijamos en un impuesto y lo analizamos como si fuera el único que pagamos, va a parecer que es poco, pero cuando le sumamos todas las obligaciones tributarias que proceden del orden nacional y provincial te das cuenta que el campo no puede seguir siendo cargado de compromisos a pagar”, le dijo Esponda a Democracia.
Para el dirigente es prioritario tratar de multiplicar la producción, de simplificar las cuestiones para que haya más generación de ingresos y que eso sea lo que genera mayores cargas de ingresos brutos, mayor cantidad de transportes en actividad, de mano de obra y de consumo.
“Sería una desilusión que sigan actuando en forma independiente y que no analicen toda la cadena. Por supuesto que toda la carga impositiva lo que va a generar es menor producción, menor cantidad de puestos de trabajo, menor generación de riqueza, con lo cual el interior de la provincia de Buenos Aires se va a haber afectado y no creo que sea ese el objetivo que busca la gobernadora, así que soy optimista en que ese revalúo no se va aplicar”, advirtió.    

Un camino corto pero no efectivo
Según el punto de vista de Esponda, Vidal y sus colaboradores del área de Finanzas avanzan en esa iniciativa “primero por necesidad de cubrir los rojos y déficits financieros, pero a la vez es un camino corto y no efectivo”.
“La senda más exitosa es que haya más producción y consumo dentro de la Provincia, y eso se logra transmitiendo transparencia y tranquilidad para que haya inversiones y mayor movimiento económico”, opinó.
“Me parece que hay gente que hoy está sentada en un escritorio y analiza exclusivamente lo que está pasando en este sector de la Provincia y no miran lo que ocurren en Nación y en los municipios”, añadió Esponda.
Consultado sobre los montos que deberían pagar los productores con la tabla 2017 del Inmobiliario Rural, Esponda dijo no tener claro el detalle de la propuesta gubernamental que tanta polvareda levantó en el campesinado.
“Como en el año 2012 (Daniel) Scioli nos dejó afuera de las comisiones de revalúo, en realidad no sabemos muy bien cuál es el proyecto que pretenden aplicar. También la ley dice que el revalúo se hace cada diez años y como el último se hizo hace cuatro tampoco correspondería, por eso me parece que la gobernadora no está pensando en el campo sino en los inmuebles urbanos”, conjeturó.
 
“No se sabe lo que van a hacer”
Mientras tanto, Alejandro Barbieri se explayó sobre los perjuicios que el revalúo causaría en el sector. “Me da la sensación de que están tratando de instalar el tema desde el propio gobierno para ver cómo cae en el productor, porque la verdad es que no hay nada formal, no hay bajada de línea que indique qué es lo que van a hacer, ni cómo ni cuándo. Lo que sí tenemos en claro es que estamos totalmente en desacuerdo con el impuesto inmobiliario complementario rural, porque es regresivo y no es justo, dado que hay partidas grandes que no lo pagan y otras más chicas que como son varias a cargo de un titular sí lo abonan”, puntualizó.
En cuanto al factor de las mejoras que serían tomadas como parámetro para establecer el ajuste, Barbieri denunció que el concepto es contrario al fomento de la inversión productiva, por lo que “en vez de gravar habría que dar incentivos a quienes buscan agrandarse”, sostuvo.
“Las mejoras en zonas rurales provienen de la inversión productiva, que se reflejan en la construcción de galpones, de parideras para cerdos y otras iniciativas que no deben ser objeto de impuesto porque con eso se estaría bloqueando al camino a que esos emprendimientos se repliquen en otros establecimientos”, agregó. 

“El campo no pasa un buen momento”
Volviendo al presidente de Carbap, De Velazco reconoció que en las exposiciones de este año se está observando un clima de tranquilidad y esperanza, dijo que aún hay mucho por corregir. “El campo no está pasando un buen momento, a pesar que la soja y la carne valen”, sostuvo el titular de Carbap, que elogió a la administración nacional aunque advirtió a la Provincia sobre la presión fiscal.
En la última reunión con el Gobierno, los ruralistas plantearon su preocupación por los aumentos impositivos que se proyectan para el sector a través del revalúo sobre el impuesto a las mejoras rurales, que ac0tualmente analizan comisiones asesoras en cada municipio.
Concretamente, consultaron a los ministros sobre rumores de incrementos “superiores al 2 mil por ciento”, cifra que fue descartada de plano por el ministro de Economía, Hernán Lacunza, quien no obstante no brindó precisiones sobre los alcances de la reforma impositiva. Además, el funcionario aseguró a los representantes del agro que la Provincia no planifica un revalúo para las parcelas rurales, aunque sí sobre las mejoras introducidas en los lotes productivos. En ese marco, los dirigentes plantearon su oposición a la medida cuando se trate de construcciones destinadas a aumentar la capacidad productiva del sector.