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OPINIÓN

El gobierno que venga tendrá que hacer otra cosa

La estrategia de estos meses la conocen hasta los chicos del jardín de infantes.
Congelar los precios de los servicios públicos y anclar el dólar por debajo de la inflación. Gasto público financiado por el Banco Central y el endeudamiento.
Todos saben - hasta el más desprevenido - que en diciembre, el que venga tiene que hacer otra cosa.
Puede ser que alguien intente seguir así. Pero entonces la salida será más tarde y más traumática.
El contexto global tampoco ayuda con un dólar fuerte y commodities agrícolas cuyos precios no rebotan lo suficiente.

El dato que faltaba
La recesión en Brasil es el dato que faltaba.
Ahora bien. Supongamos que Daniel Scioli es presidente.
¿Quién asume? Miguel Bein o continúa Kicillof.
Segunda pregunta: ¿Cuánto tiempo le dan a Scioli para que muestre resultados?
Según Horacio Verbitsky en Página 12, sólo 6 meses. Allí que haga las correcciones necesarias.
En ese tiempo, según el Estudio Bein hay que negociar con los fondos buitre para conseguir créditos en dólares a tasas de interés más bajas.
No como ahora que se paga el 10% anual en dólares contra el 3,5% de Bolivia.
Segundo, eliminar las retenciones a las exportaciones de todas las economías regionales. Reducirlas para el maíz, trigo y cebada.
Tercero, recorte de subsidios a la energía y el transporte.
El retraso de la tarifa eléctrica se ubica en alrededor de 6 veces y el transporte de colectivos y trenes en 3 veces.
Al mismo tiempo aconseja una devaluación, que no será brusca. Si se pone en práctica, los salarios medidos en dólares van a bajar. La inflación subirá.
Hasta que se reacomoden las variables pasarán mucho más de 6 meses.
Recordemos que el anterior presidente del Banco Central, Juan Carlos Fábrega, en enero de 2014, devaluó un 21% y la inflación creció el 4% mensual durante varios meses.
Desarmar el esquema de subsidios de una sola vez, resulta imposible por la resistencia social y las protestas en la calle.
Consejo a Scioli. Si es presidente: ¿Por qué no lo deja a Kicillof que haga el ajuste y después lo pone a Miguel Bein que es su hombre de confianza?
Se supone que el actual ministro nunca agarraría y dejará que el trabajo sucio lo haga otro.
¿Se lo puede obligar? Por ejemplo diciendo. Usted manejo muy bien la transición, por eso el pueblo le pide que siga unos meses más para que podamos aprender de su sapiencia. Usted piensa que no se lo va a creer.
Pero por las dudas ya aclaró el ministro que “su mandato termina con la Presidenta". “Me voy el 10 de diciembre”, dijo. Más claro imposible.
Faltó que dijese: “arréglate con lo que dejo”.

Cambió el mapa

Lo cierto es que el mapa cambió. Hace unos 60 días, todos pensaban que venía un gobierno, más amigo de los mercados. Craso error.
Por eso bajó todo y empezó a subir el dólar blue. Como decía un viejo árbitro “siga, siga “.
¿Se puede hacer eso en economía? No, pero lo más probable que ante las dudas gane el gradualismo por encima de una política de shock.
Me dicen que tanto Macri como Scioli serian gradualistas. Nadie se va a animar a patear el tablero con medidas bruscas. Asustarían a la gente. En realidad se asustan los dirigentes.
El nuevo gobierno además deberá conseguir dólares.
Las reservas internacionales no tienen margen de caída.
Atraso cambiario y cepo.
¿Quién le pone el cascabel al gato?
¿Kicillof o Bein?
Si el segundo no acierta, a Scioli le morderán la yugular más pronto que tarde.

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