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ENTREVISTA CON NANCY BRACCO

A un año del crimen de Naira: “Estos días para mí son una pesadilla”, dijo su madre

La mujer contó que es “muy difícil” salir adelante luego de la pérdida de su hija. Además, se mostró indignada por el traslado a prisión domiciliaria de la menor de las acusadas.

Un día como hoy, pero hace un año, la familia de Naira Cofreces hacía una desesperada vigilia en el sector de terapia intensiva del Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA) de Junín “Abraham Piñeyro”. Naira Cofreces, de 17 años, se dirimía entre la vida y la muerte luego de recibir una salvaje golpiza a la salida de la Escuela Secundaria 5, a la que asistía. Horas más tarde, el 27 de abril, los médicos comprobaron que la adolescente se encontraba con “muerte cerebral” y mantuvieron su cuerpo con vida unas horas más para poder realizarle la ablación de órganos.
Su madre, revive cada uno de esos momentos, casi involuntariamente. Dice que no puede dejar de pensar ni un segundo de lo que pasó. Desde el 23, la noche en que su hija recibió la brutal agresión, hasta el dramático final.
Ahora, mezcla dolor con indignación, tras enterarse que la menor de las acusadas recibió el beneficio de la prisión domiciliaria. En diálogo con Democracia, Bracco contó cómo lucha día a día para salir adelante y convocó a la comunidad a participar de una marcha por Justicia, hoy, a las 19.30, desde la Fuente del Milenio.

¿Cómo estás viviendo estos días y qué pasó durante este año, tras la muerte de Naira?
Estos días son tremendos. Es levantarme todo el día, toda la noche, acostarme y pensar y soñar con ella y me parece siempre que la veo entrar. Que la veo en el día a día. Hay días que estoy tirada mal y otros, por fuerza de las pastillas y la gordita, digo:‘no me puedo ver así’, y me tengo que levantar.
Los días de Pascuas fueron tremendos. El sábado y domingo todo el día, toda la noche llorando. Ella (en referencia a la hermana menor de Naira, de 6 años) solita porque el papá trabajaba y me dice:‘mami no llores’. El domingo me levante con otra idea. Por ella me tengo que levantar, porque tengo que sacar fuerza de donde sea, levantarme por ella porque estuvo todo el día sola y abandonada pobrecita.
Y ahora estoy un poco indignada por la situación que me entere el otro día de que la menor había salido, y dolida porque digo que no hay justicia. Sin juicio, sin nada, ya está con arresto domiciliario.

¿Cómo viene el avance de la causa?
Yo el otro día estuve con Carlos Torrens, que es mi abogado, que está trabajando en el caso y FedericoMastropierro, y me dijo que me iba a volver a llamar, que fecha justa para el juicio no había pero que iba a ser este año. Pero hasta por lo menos julio, agosto, no.

Respecto de las personas que fueron acusadas, ¿estás conforme? ¿Creés que más implicados?
Siempre se dijo que eran un montón (las agresoras) y son las únicas tres (acusadas). Lo que pasa es que agarraron a las que más violencia tuvieron. Que habían colaborado, colaboraron como diez. Nunca se encontraron los videos que los chicos filmaron, nunca apareció nada.
Y eso es otra cosa por la que estaba muy dolida; y un poco triste por el asunto de que yo la mande a la escuela en confianza, durante un año, nadie levantó el tubo para decir:‘Nancy,¿cómo estás? En un año no vi nunca a nadie, ni directivos. Nadie para  preguntar:‘¿precisas algo, cómo estas? Nunca de la escuela tuve nada, ni una información, nada.

Estás convocando a una marcha para reclamar Justicia…
El domingo (hoy) en la Fuente del Milenio, hacemos una marcha por la memoria de ella y para pedir Justicia también, una marcha de velas, a las 19.30. Vamos a hacer el recorrido por Sáenz Peña hacia Tribunales.
Yo la verdad que cuando me dieron la noticia, que tampoco me la dieron, nadie levanto el tubo para decirme mira paso esto, lo otro. Yo fui (a la fiscalía) por otros motivos para ver cómo iba la causa y hablar con el fiscal, me dijo: ‘mirá la que va a salir dentro de una semana con arresto domiciliario es la menor’.

¿Y qué argumentos te dieron sobre el goce de este beneficio?
 Porque es menor. Pero el fiscal me dijo que ella no tenía la culpa, que había aportado mucho en la causa que como que culpó a las mayores. El fiscal me dijo eso. Que había aportado cuando yo sé que no es así, que fue la primera que golpeó a Sofía (la amiga de Naira, destinataria original de la agresión). La menor fue la que le dio la trompada, o sea que tuvo culpa, no es como dicen ellos, que no tuvo nada que ver, que aportó para las otras asesinas. No es así. Yo tengo casualmente los testigos que declararon y saben bien que la primera que le pegó y le dejo el ojo negro fue ella que es boxeadora.

¿Cómo dicen que no tiene nada que ver y que ayudo a la causa?
Yo se que sí tuvo que ver. Yo pienso que estará en el domicilio hasta el día del juicio que tendrán que declarar, porque es indignante.

Y con todo esto, ¿cómo se hace para enfrentar el día a día?
Todos de afuera opinan, te dicen ‘andá a trabajar’, pero el que no lo vivió no lo sabe. Sinceramente, no sabe lo que es. Todos dicen ‘te haría bien volver al trabajo’, pero mi psiquiatra no me lo recomienda porque estoy muy medicada todavía, no me pueden bajar las dosis, sigo tensionada, sigo llorando, las pastillas de dormir no me hacen nada, me tuvo que dar más.
Yo pienso sinceramente que, si no fuera por la gordita, que agarro fuerzas y pienso en ella, me veo internada en cualquier momento. Si no fuera que está ella, a veces quiero estar encerrada en un cuarto oscuro, no salir más, que nadie me moleste. Por ella me levanto y salgo. Lo hago por ella, aparte como era Naira con ella. Ella siempre decía que me quería ver bien. Nunca me quería ver mal. Y con la nena, Dios mío. Por ahí me pongo a pensar, Naira no quería esto para mí. Entonces yo sola por ahí me levanto. Es re triste. Opinar se puede opinar de afuera pero tenés que vivirlo y estos días para mí son una pesadilla. Es como revolver todo. Dos veces a la semana voy al cementerio y lloro, le hablo y como que estoy pensando: ‘a esta hora la estaban por empezar a operar’. Voy mirando la hora, el reloj, ‘a esta hora estaba acá, estaba allá’. Voy mirando, sacando cuentas. Es una cosa que no se la esperaba tampoco y la indignación. Siempre me pregunto:‘¿Por qué no hicieron esto?, ¿por qué lo otro? Si yo sabía que iba esa clase de gente tampoco la hubiese mandado. Nunca imaginé que iba esa clase de gente a la escuela, nunca. Yo ni sabia.

¿Se acercó algún familiar de las imputadas para hablar? ¿Valorarías que las acusadas digan que están arrepentidas?

No. Por más que digan… Llegó a mi oído que una decía que estaba arrepentida. No sé qué voy a hacer yo cuando las tenga enfrente, si aguantar, qué hacer. Voy a tener que estar re empastillada porque yo no quería verlas pero lamentablemente en el juicio las voy a tener que ver. No sécómo voy a aguantar.

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