Independiente fue contundente y avanzó a la final de la Liguilla

En un gran espectáculo, Independiente derrotó a Belgrano 4-1, luego de ir perdiendo. El “Rojo” se lo dio vuelta al Pirata con un golazo de Benítez. Vera anotó el empate y el tercero. “Cebolla” Rodríguez marcó el cuarto para llegar a la final de la Liguilla Pre-Libertadores. Marquez abrió la cuenta a los 6 minutos.
Ambos comenzaron el pleito con una propuesta prolija. Los de Mauricio Pellegrino apostaron en la individualidad de Diego Vera, la calidad de Cristian Rodríguez y la pegada de Federico Mancuello. En cambio, los de Ricardo Zielinski aprovecharon los incisivos contragolpes para ponerse en ventaja.
Una desafortunada salida de Víctor Cuesta le dio la posibilidad a Emiliano Rigoni de adueñarse de la pelota y encarar hasta la zona de peligro. El chico de Colonia Caroya se sacó de encima a la última línea local y habilitó a Fernando Márquez para que el goleador establezca el 1 a 0. La sorpresa enmudeció al Libertadores de América.
Sobre la media hora una intervención de Martín Benítez mereció concluir en la red. El de Posadas construyó una extraordinaria pared con el ex Estudiantes y tocó suave ante la salida de Juan Carlos Olave. Cuando de las tribunas se empezó a escuchar el grito sagrado, Federico Álvarez desactivó el tanto a 30 centímetros de la línea de meta. Fue la más clara del Diablo.
La justicia se estableció después de un preciso centro de Jorge Ortiz. El Marciano buscó a Viruta y el atacante fusiló al arquero visitante, quien logró desviar el cabezazo. Sin embargo, el rebote le quedó servido a Vera y el 9 facturó.
La polémica de la noche llegó después de una clara mano de Gustavo Toledo adentro del área. Los reclamos de Jorge Velázquez fueron en vano, dado que el árbitro interpretó que la infracción fue sin intención y por ello no sancionó el penal.
En el complemento Matías Pisano se disfrazó de conductor y llevó a Independiente a la victoria. El ex Chacarita se asoció con Benítez y el misionero improvisó una obra que depositó al Rojo en la final. En una demostración de calidad y sutileza, el canterano convirtió un golazo para revertir el marcador.
No conformes con los dueños de casa continuaron lastimando a su rival herido y sentenció la llave con otra genialidad de Diego Vera. El pase entrelíneas de Benítez y la efectiva definición de Viruta sellaron el 3 a 1.
La victoria se convirtió en goleada. Los toques cortos desintegraron a la defensa de Belgrano y el Cebolla Rodríguez estableció el 4 a 1 definitivo.