Gustavo Víttori logró el título OMB Latino

El boxeador de Concordia (Entre Ríos), Gustavo “Perrito” Víttori, se impuso por nocaut en el segundo asalto ante el bonaerense Elías Vallejos y se quedó con el cinturón latino, superligero interino de la Organización Mundial de Boxeo, tras haberse radicado nuevamente en su ciudad, luego de su paso por la promotora “Arano Box”.
Una potente mano cruzada a la zona hepática de su oponente, fue letal para dejar fuera de combate a quien llegaba a este combate como favorito y local.
El “Perrito” puso su esfuerzo, se lo vio convencido de para qué estaba arriba del cuadrilátero, ya en su Facebook prometía volver a Concordia con el cinturón de campeón y cumplió, pero por sobre todas las cosas logró con la promesa que le hizo a su padre (fallecido hace poco) sobre que algún día ser campeón en el boxeo, y eso ya es mucho.
También es histórico para el boxeo de Concordia, porque esa ciudad ha tenido campeones argentinos, sudamericanos, pero hasta ahora nunca un campeón latino de una organización internacional y si bien es un interinato, en algún momento se tendrá que cruzar el campeón con el concordiense para unificar el título.
Son de esos títulos que uno los siente un poco como propios porque nunca es fácil para un boxeador, pero tampoco lo es para el periodismo, cuando desde un comentario se intenta contribuir a la formación de los pugilistas para que mejoren ciertas cosas.
Víttori viene de una familia de pura cepa, de madera de boxeo ya que desde su padre, su mamá y el resto disfrutan de este deporte como pocos y se apoyan entre sí como debe ocurrir cuando se tienen fines o metas, como en este caso el título.
La vida les jugó una mala pasada hace un tiempo, llevándose a “Vitoco” (el papá de Gustavo) tras padecer una grave enfermedad, pero hoy y si bien no se compara para nada con la pérdida de un ser querido, les devuelve algo con esta alegría de campeón, que los une familiarmente mucho más.
La pelea duró poco, demás está decir que el concordiense fue dominante y trabajó con comodidad ante un boxeador que subió como favorito, pero se encontró con un “Perrito” más potente, con un trabajo de gimnasio que le está dando resultados, porque es como que recuperó la pegada que tenía y así lo demuestran sus últimas dos peleas donde se impuso antes del límite.
Estará en él ahora toda la responsabilidad de continuar firme en el gimnasio, sabiendo que no es fácil, pero que en el boxeo son pocos años para aprovechar a pleno y poder hacer una carrera y una diferencia económica si se quiere. Tiene todo para poder hacerlo, apoyo de la gente, apoyo en el gimnasio y sobre todas las cosas un apoyo familiar incondicional, por eso remarco que es pura responsabilidad suya seguir creciendo y mantener ese cinturón y otros que seguro van a venir, en su cintura.